Nunca es tarde para cumplir con la legalidad, aunque ese repentino abrazo al ordenamiento jurídico no pueda tener efectos retroactivos. El ente público Radiotelevisión Canaria acaba de publicar en su web las Instrucciones Internas para la Contratación, un reglamento de obligada existencia para todo organismo que dependa de la Ley de Contratos del Sector Público. Desde que en 2008 el Gobierno de Paulino Rivero cambiara, manu militari, el procedimiento de contratación de programas de entretenimiento (el famoso lote A) RTVC debió hacer públicas esas instrucciones, pero lo ha hecho en enero pasado al recibir un contundente dictamen jurídico encargado por la Asociación Canaria de Empresas de Producción Audiovisual (Acepa) en el que, entre otras anomalías, se resaltaba esta grave carencia. La primera duda que nos embarga es si han sido legales todos los contratos celebrados desde 2008 hasta enero de 2010, esos que se encuadran dentro del genérico epígrafe de Mamandurria TV.