Pero mientras Nacho fortalece su militancia y sus listas, tanto en Lanzarote como en Fuerteventura se cuecen alianzas electorales de largo recorrido. O de medio recorrido, según se mire. La posibilidad de un acuerdo para las listas al Parlamento entre Nueva Canarias y el CCN es algo que ninguna de las partes rechaza, y hasta es más que posible que, salvo en muy aisladas plazas, la cosa se esté madurando. En Lanzarote se apunta, por ejemplo, a que el PIL-PNL más Alejandro Díaz, del CCN, puedan llevarse tres diputados juntos. En Fuerteventura, la idea tropieza con el marqués, que si definitivamente se sumara al partido de Nacho junto a Fonfín Chacón, sería el principal obstáculo para que NC admitiera la alianza. Bueno, NC y el PSOE, que sería a la postre quien recibiría a Nacho y a Román con los brazos abiertos el 28-M si, entre los tres, suman 31 o más. El acuerdo no incluiría ni cabildos ni ayuntamientos, donde vale hasta tirarse el mobiliario urbano a la cabeza.