El periodista en cuestión llegó a contarle a la Policía que había sido José Luis Mena el que le mostró la libreta de Toñi Torres antes de que fuera detenido el alcalde Valido y todo su grupo de gobierno. Este relato lo hizo el periodista en una conversación informal, en una cafetería, en presencia de dos funcionarios policiales. Luego, ante la juez Zabala, el periodista dijo que se lo tenía que pensar mejor antes de prestar declaración de manera formal en calidad de testigo. Se lo pensó finalmente y dijo que no, que en Telde no se pueden hacer esas cosas con tanta naturalidad. Pero la Policía hizo constar en un oficio todas las conversaciones, lo que irritó enormemente al periodista al descubrirlo cuando se levantó el secreto de las actuaciones. De la mano de Mena, se plantó en un notario y declaró que él nunca dijo lo que la Policía dice que dijo. Un oficio y un acta notarial tienen calidad de documentos públicos. Alguna de las dos partes ha falsificado algo. Nos tememos.