Pero volvamos, ya para terminar, a Las Teresitas y a Emmasa. El informe que elaboró la Policía sobre las redes de financiación particulares de Miguel Zerolo incluye un dossier sobre la implantación de una filial de Sufi, propiedad de Sacyr, en Senegal para la producción de biocarburante. Hasta allí, siempre según los informes policiales, se trasladó Jorge Bethencourt, testaferro del ex alcalde y asesor de la gerencia de Urbanismo en aquel aciago año de 2006. Para la Policía, esta inversión en Senegal camuflaría ciertas operaciones relacionadas con la venta de Emmasa a Sufi. El informe añade la necesidad de aflojar 3,2 millones de euros de 2006 para “gastos de implantación”. Para que ustedes cuadren sus fechas, recuerden que Sacyr se hizo con Emmasa de forma efectiva en 2007. Tanta implantación cae por su propio peso si se parte de la base de que ya el Cabildo de Tenerife tiene una empresa pública, Cultesa, trabajando el biocarburante en Senegal desde hace años. El informe añade que el presidente de Senegal, Abdoulaye Wade, está a favor de este negocio, y nosotros contribuimos a la causa afirmando que con 3,2 millones de euros se pueden hacer virguerías en Senegal. Incluso canalizaciones.