A la hora de redactar estos comentarios tan exentos de mala uva, desconocíamos si alguna publicación o medio audiovisual del régimen había obtenido lo que el común no había logrado en la jornada del viernes: unas declaraciones de contestación a nuestra información por parte de José Manuel Soria, de José Manuel Arnáiz o de Pepa Luzardo. Y mira que lo intentaron todos. Los tres prefirieron encerrarse en su marisma y esperar a que amaine el temporal. Sólo Mauricio abrió la boca para ratificarse en lo dicho y para dar una nueva vuelta de tuerca a su propuesta anunciando guerra contra el infiel que no nos devuelve la Base Naval. Pero de dimisiones, nada, oye.