Si no fuera por el traspie en la estrategia de relevo a Lobo, madurita a base de dejarlo solo en el partido, CC estaría buscando como loca a un concejal de la lista de 17 de Santa Brígida que sustituyera a Casas, para cumplir la trinchera: apuntalar todos los pactos CC-PP del paralelo 28. A Lucas Bravo le basta con un voto más para gobernar con mayoría absoluta. Casas siempre negó el apoyo al PP en coherencia a su entender político y por lo apestoso del caso Brisan. De ahí que el Niño Bravo gobierne desde 2007 con los tres concejales de Los Verdes -dos de ellos ex del PSC-PSOE-, otrora azote con Casas de la presunta corrupción en la Villa. Pero CC tiene tanto quebradero con Lobo que no se ha puesto a indagar quién de los 17 de la lista pudiera ser captable para darle un subidón al Niño Bravo. Le valdría ceder una maría de concejalía a CC y así recuperaría departamentos verdes clave como Urbanismo o Hacienda. Pero hay un problema: la lista de CC se corresponde casi con los miembros de la Ejecutiva local que han dimitido en peso. Alguno habrá recuperable para la causa, que todo en política es posible, pero de entrada, en CC, se cuestionan pPara qué pedirle el acta “si todos los demás son iguales”. Ya lo resolverán a su modo...