Mientras asimilamos lo de Cristina y esperamos novedades acerca de los transparentes concursos convocados por el ente político-empresarial que se ha hecho cargo de la gestión del Recinto Ferial de Canarias, seguimos acercándoles estimulantes novedades de lo que allí pasa. Ya han contratado cajera, primera noticia, que viene a ser una funcionaria del Cabildo que han trasladado hasta allí. Le deseamos muchos éxitos, faltaría más. Pero la novedad más importante la constituye el incontestable hecho de que la gestoría a la que le ha caído la externalización de los asuntos que antes llevaba un graduado social de la casa, no funciona correctamente. O al menos no lo hace con la diligencia anterior. A estas alturas no han cobrado sus finiquitos (la indemnización, sí) los despedidos de Infecar, que lo fueron el 28 de enero. Los afectados llaman, pero les dicen que la gestoría todavía no ha preparado los papeles. Cosas de las privatizaciones, que son así.