¿Ser crítico y no pagar el canon correspondiente? Eso es imposible en la Canarias de hoy, tan dada al nepotismo, a la factura siciliana, al palo y tentetieso. El director general de Radiotelevisión Canaria, Guillermo García, remitió este lunes un atentísimo escrito al director de la Agencia Canaria de Noticias (ACN Press) anunciándole que se le rescinde el contrato por el que esta empresa prestaba el correspondiente servicio a la radio y a la televisión públicas. Lo venía haciendo desde 2000 a plena satisfacción del cliente, como atestiguan los editores y responsables de Informativos, no en vano es la agencia que presta el mejor servicio multimedia (vídeo, fotografía, texto y audio) con equilibrio y objetividad. Y a mayor abundamiento, se trata de la agencia que ha ganado el concurso para proveer de este tipo de servicios a todos los centros directivos del Gobierno de Canarias. ¿Hace esto Willy García en aplicación de una sobrevenida política de austeridad? Pues no, porque ACN es muy baratita, apenas 1.200 euros al mes, mucho menos que el alquiler de limusinas del director general. El motivo radica en que el dueño de ACN, Eduardo Araujo, es el presidente de la Asociación Canaria de Empresas de Producción Audiovisual, ACEPA, que tras un exhaustivo informe sobre incumplimientos, ha reclamado la dimisión del director general de La Nuestra (a tiempo parcial).