Ya les hemos dicho muchas veces que los periodistas no estamos para andar planteando denuncias contra los políticos, que lo nuestro es indagar, contrastar y publicar. Han de ser otras instancias del Estado de Derecho las que ejerzan acciones civiles o penales en cada caso. Lo que pasa es que hay ocasiones en que el ataque es tan directo que debemos actuar, sobre todo cuando los mecanismos de ese Estado no funcionan correctamente. Y en la Autoridad Portuaria de Las Palmas hay muchas cosas que no funcionan correctamente desde hace tiempo sin que haya alguien que trate de meter aquello en cintura. Un día les contamos que Arnáiz había prohibido acceder a los trabajadores del Puerto a nuestro periódico, y lo corroboramos llevando un notario. La querella ya ha sido admitida a trámite porque podrían estarse lesionando derechos fundamentales mediante una presunta prevaricación. Hay otros organismos en estudio, lo que sólo constituye un aviso.