La indignación en el PSOE canario era descomunal la mañana de este martes al ver en toda la prensa el comunicado del SUP. Algunos dirigentes propusieron interponer una querella contra el sindicato por revelar aspectos de la seguridad del ex ministro canario y, de paso, afearle que mintiera al decir que es López Aguilar quien pide once policías, a lo que sólo faltó añadir que los obliga a formar cada mañana a la puerta de su casa para pasar revista. Finalmente ganó la doctrina de no judicializar el asunto y hablar con la dirección nacional del SUC, que no recogió velas del todo.