Aznar se declaró opuesto a la existencia de cualquier tipo de bonus, “en forma de recursos del llamado Fondo de Reestructuración y Ordenación del Sistema Bancario (FROB)”, del que se beneficien entidades de crédito que no modifiquen sus equipos directivos. Por ello pidió la “máxima transparencia”, a través de subastas públicas de entidades recapitalizadas. Desde luego que Ángel Acebes, flamante consejero de Caja Madrid por dedocracia de Esperanza Aguirre, Mariano Rajoy y el propio Aznar, debe ser la excepción que confirma la regla, porque en el PP ya se sabe que la ley del embudo es la más justa y las excepciones siempre las protagonizan ellos en su propio beneficio.