Habrá dejado de llover, pero en la Universidad de La Laguna hubo rociada de la buena el viernes. La ex gerente de la Universidad de La Laguna se despidió el pasado viernes del Consejo de Gobierno con un chorreo de los que hacen época. Entre otras lindezas, Aurora Rodríguez acusó a sus compañeros de haberla dejado en posiciones embarazosas y de proclividad al catarro trasero. En concreto y especialmente, la ex gerente se dirigió a la vicerrectora de Ordenación Académica y Profesorado, Fabiola Martín Cáceres, por un asunto de final de año. Cuentan que cuando los departamentos remitían facturas al Rectorado para el pago de materiales, se encontraron con la desagradable sorpresa de que en sus respectivas partidas presupuestarias el dinero había desaparecido. Al parecer, por órdenes de la superioridad, se desviaron fondos del capítulo 6 (inversiones) al 1 (personal), para pagar atrasos al profesorado, lo que es absolutamente irregular. Y para mayor recochineo, sólo a algunos profesores, no a todos. Atentos, que puede haber apertura de expedientes.