Tardaremos meses en cerrar el triste capítulo de la situación generada en la isla de Tenerife como consecuencia del corte de fluido eléctrico derivado de la tormenta Delta. El cabreo ciudadano no ha parado de crecer y casi con la misma pasión que Unelco-Endesa anuncia que está haciendo todo lo posible por reponer el suministro, las autoridades canarias, y muy particularmente las tinerfeñas, cargan contra la eléctrica. Desde luego hay que endilgarle a Unelco gran parte de la culpa, pero quizá habría que revisar también los protocolos de Industria a ver si alguien no ha hecho los deberes exigiendo un mantenimiento adecuado. Mañana puede pasar en cualquier otra isla.