Se coge más pronto a un mentiroso que a un cojo. Y nosotros nos quedaremos una vez más esperando a que pase esta cacharrada soriana para que vuelva a resplandecer la única verdad sobre los casos de corrupción del PP: que no fueron un invento de nadie y que una piara de altos cargos y militantes de ese partido se dirige camino de su particular San Martín a poner el culete en el banquillo de varios juicios con jurado. Lo de El Mundo también tendrá su penitencia, estaría bueno, si bien es el propio periódico el que se tropieza con sus propias mentiras, porque en un intento por resaltar que a los imputados del PP se les descarga de algunos de sus delitos, pone como ejemplo el que peor venía para sus intereses conspiranoicos: “En marzo de 2009, el Tribunal Superior de Justicia de Canarias archivó la denuncia por malversación” contra Francisco González, alcalde de Mogán. ¿Saben ustedes qué juez archivó esa denuncia, formulada por la Policía tras una rueda de prensa de Paquirrín en el hotel Iberia? Pues la juez Victoria Rosell, mira tú qué cosas, la misma a la que el PP y el diario El Mundo acusan sin recato de estar en esa misma conspiración mediático-jurídica-policial que se han inventado. Se muerden la lengua con serio peligro de envenenarse.