Ironía y crítica de la mano de Thomas Schütte
MADRID, 16 (EUROPA PRESS)
El Museo Reina Sofía inaugura una retrospectiva dedicada al artista alemán Thomas Schütte. Instalaciones, acuarelas y aguafuertes, fotografías, maquetas arquitectónicas, y ejemplares de sus principales grupos escultóricos, como las series de 'Mujeres' y 'Perros', componen esta muestra, formada por 75 obras distribuidas por las esquinas, galerías, e incluso el jardín del edificio Sabatini.
Bajo el título 'Thomas Schütte. Retrospección', esta exposición, abierta hasta el 17 de mayo pretende realizar un recorrido por los diferentes momentos artísticos de artista, desde sus primeras obras realizadas a finales de la década de los setenta, cuando todavía era estudiante de Bellas Artes, hasta sus trabajos más recientes. Comisariada por Lynne Cooke, es la retrospectiva más completa organizada sobre el artista en España. Schütte está considerado uno de los artistas alemanes más importantes de su generación
Thomas Schütte reconoció que esta exposición ha sido como realizar “un examen” de su obra al repasar gran parte de sus piezas y descubrir que su labor como artistas todavía no ha terminado y que muchas de sus obra vuelven a inspirarle.
En su intervención también hablo del “respeto” del público hacia el arte y de la cantidad de personas que siguen formando colas a las puertas de los museos. “Los museos están llenos de gente. El arte sigue dando dinero, es una de las pocas cosas que todavía no ha perdido respeto”, explicó el artista. “Pasa algo parecido con los deportes”, agregó.
CRÍTICAS A SUS MUJERES RECLINADAS
Preguntado por las críticas feministas respecto a sus “mujeres reclinadas”, el artista indicó que sus obras “se analizan de diferente manera con el paso del tiempo” y subrayó que el objetivo de estas piezas era “descubrir la escultura”. “Si tengo que pedir perdón, pido perdón”, alegó el artista, para quien estas piezas no le parecen “más violentas o más impresionantes” que otras obras de la tradición española.
En palabras del director del Museo Reina Sofía, Manuel Borja-Villel, la obra de Thomas Schütte (Alemania, 1954), aúna “ironía y crítica” y dialoga con el espectador hasta dejarlo “perplejo”.
En esta misma línea, Borja-Villel definió la obra de Schütte como “radical” y de “aspecto ambiguo” e indicó que para este artista el “proceso” es más relevante que el resultado. “La indagación es lo que hace importante su obra”, señaló el director del Museo Reina Sofía.
El título de la exposición 'Retrospección', según la comisaria de la muestra, no es gratuito y alude por un lado al conjunto de la carrera de Schütte que abarca ya más de treinta años, y por otro a que el artista, sobre todo en la última década, ha vuelto la mirada al pasado buscando inspiración tanto en sus primeras obras como en la escultura de épocas anteriores.
CUESTIONES SOCIALES Y POLÍTICAS
Desde finales de la década de los setenta, trabaja en series homónimas que examinan momentos de aislamiento, vulnerabilidad y desesperanza humanos, no carentes de ironía. Se hizo muy conocido en los ochenta con sus maquetas arquitectónicas. Las obras tienen una apariencia artesanal a la vez que utópica. Toda la obra de Schütte está impregnada de cuestiones sociales y políticas así como de la preocupación por la relevancia y la posición del artista en la sociedad.
Schütte utiliza géneros escultóricos tradicionales, como la figura reclinada femenina, el busto de retrato conmemorativo, así como el monumento y el memorial, pero con resultados nada convencionales. Sus grupos escultóricos plasman su deleite en el material y su inquietud infatigable por las técnicas más diversas.
Así en el jardín del edificio Sabatini, se ha instalado la conocida serie de esculturas tituladas Frauen, Mujeres (2000-2006). Penélope Curtis, en uno de los textos del catálogo, afirma que estas piezas“impresionan por el salvajismo _percibido o conferido_ de su representación de la forma femenina. Hay algo en las monumentales mujeres que combina poder y vulnerabilidad; son a la vez víctimas e ídolos”.
Asimismo, en uno de los pasillos del claustro también se ha instalado obra, se trata de criaturas o figuras fantásticas y que llevan al visitante a acercarse paulatinamente hacia ellas, son figuras de aluminio pulido Grober Geist (Gran espíritu) 1997.
Mientras que la Sala de Protocolo acoge la serie de obras 'United Enemies - A Play in Ten Scenes' (Enemigos unidos. Obra en diez escenas) 1993-1994; compuesta por figuras mutiladas, algunas de ellas metidas en fanales de cristal.
Mañana por la tarde, el Museo Reina Sofía ha organizado un encuentro entre Lynne Cooke, comisaria de la exposición, Julian Heynen, director del Kunstsammlung de Nordhein-Westfalia y el artista. El acto consistirá en una conversación con Thomas Schütte donde reflexionarán sobre la exposición, y sobre las condiciones de la escultura contemporánea.