Olga Mesa presenta en Tenerife una propuesta diferente de danza

Olga Mesa, la bailarina y coreógrafa asturiana que se ha convertido en una de las artistas de vanguardia con más proyección de nuestro país, presenta en el Auditorio de Tenerife su última producción, Solo a Ciegas (con lágrimas azules). El espectáculo tendrá lugar en el escenario de la Sala Sinfónica, que compartirá con el público este domingo a las 21.00 horas.

Según la propia Olga Mesa, “he construido Solo a ciegas (con lágrimas azules) a partir de una escucha íntima y personal, abandonando mi cuerpo a una práctica de impulsos y apetencias. Es en este territorio de memoria física, de escucha y de resonancia sonora, en donde se sitúa mi trabajo actual, proponiendo una nueva presencia indirecta y autónoma a la mirada del espectador, una presencia que desea desprenderse de su propia imagen y formulación. Esta obra es para mí un objeto dramatúrgico inesperado en el sentido de que todo lo que en ella sucede pertenece profundamente al terreno de la intuición, abandonando el cuerpo a su sensación (decisión) más inmediata”.

Olga Mesa sumerge al espectador en un universo de evocaciones, de presencias limítrofes y memorias, invitándonos a introducirnos en un nuevo espacio de escucha y de percepción del cuerpo. Movimientos intuitivos, imágenes ausentes, periféricas o escondidas. Espacios sonoros imperceptibles, inesperados, y no del todo identificables. Palabras reflexivas, palabras intrusas y desnudas que extraen del cuerpo sonidos involuntarios. Zonas narrativas en construcción autónomas y provisionales, que se crean a través de territorios del cuerpo entre la visibilidad y la escucha. Dramaturgía que nace de un sistema emergente de enunciados fragmentados y dispersos, en forma de escritura aleatoria.

Existe la necesidad de descifrar inscripciones de un pasado y resituar la mirada sobre aquellos paisajes olvidados de resistencia, pérdidas y destrucción. Reuniendo historias y memorias que pertenecen a otros cuerpos: cuerpos abandonados, exiliados, violados, desaparecidos, imaginados. Surgiendo al borde de cualquier movimiento o palabra, la presencia de un impulso imprevisto, de un grito, de un animal-totem, o de un posible tango-poema inventado.

Evocación con esta “danza a ciegas”, a la memoria de su abuelo, bajo la sombra de un exilio temporal en tierras porteñas, con Buenos Aires de fondo, unos años antes de la guerra civil española. Todo es, o puede ser verdad. Todo está presentado en esta obra, con el deseo de reunir todas las miradas posibles sensibles a la construcción de un cuerpo en tiempo real, y sus sentidos más inmediatos. Todo presupone un largo y efímero recorrido, inspirado en los orígenes de una memoria común latente. Proyección fílmica fuera de campo, luz-imagen reveladora, indirecta, y oculta. Y el público como compañero (no) visible de historias fragmentadas y reveladoras, teniendo como invitados de viaje a Puccini, Pasolini, Verlaine, Walser, Monteiro y sus códigos secretos. Olga Mesa propone con Solo a Ciegas (con lágrimas azules) un objeto “inesperado”, reuniendo todas las herramientas de su investigación escénica, y volviendo a un principio en donde resituar su cuerpo como transmisor y vehículo de una memoria común que continúa.

Coreógrafa y artista visual, Olga Mesa funda su compañía en 1992 en Madrid. Desde entonces ha creado doce piezas escénicas, a menudo reunidas bajo grupos temáticos como la trilogía del cuerpo Res, non verba (Las cosas, no las palabras) 1996-1999, realizada en colaboración con el artista visual Daniel Miracle. Destacan sus vídeocreaciones Lugares intermedios (1993) y Europas (1995) que introducen de manera decisiva la presencia de la cámara en todas sus obras escénicas posteriores.

Realiza el proyecto Mas publico, mas privado (2001- 2006) formado por cinco movimientos, siendo el dúo La danse et son double (2006) el último de ellos. En 2001 es invitada por el Thêàtre de la Ville en Paris a llevar a cabo la reposición de su solo estO NO es Mi Cuerpo (1996), iniciando una nueva etapa de colaboraciones con diferentes estructuras de producción y centros coreográficos en Francia. En 2005 es invitada por el Théâtre Pôle Sud de Strasbourg como artista residente durante dos años, formulando nuevos espacios de visibilidad para su trabajo: El cuerpo próximo (laboratorio itinerante) y Le prochaine regard (film documental). También en 2005 crea la asociación Hors Champ/ Fuera de Campo, en Francia. Sus creaciones han sido presentadas en España, Portugal, Francia, Suiza, Alemania, Italia, Inglaterra, Uruguay, Chile, Brasil y Estados Unidos (Nueva York).