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Victoria de prestigio

Nuevo triunfo, el tercero consecutivo en el Centro Insular, donde la afición jugó un papel importante cuando peor lo tuvo el equipo. Los amarillos controlaron el partido de principio a fin sin dejar a Alicante dar la vuelta al choque, merced a una trabajada defensa y las continuas perdidas del rival.

En el comienzo, parecía como si ambos equipos habían pactado para que Savané anotase en la primera acción de juego, donde los colegiados detuvieron el tiempo unos segundos, para que recibiese la ovación de todo el público, convirtiéndose en el máximo anotador de la historia amarilla al superar a John Morton.

Tras la celebración, Alicante se descolocó y tardó muchos minutos en superar el buen planteamiento de la defensa grancanaria. Eso lo aprovecharon los hombres de Pedro Martínez, que con un contragolpe de Bellas pusieron la primera gran ventaja del partido, 12-4.

Ivanov comenzó a aparecer dentro de la pintura, pero la velocidad del Granca en ataque desarboló la defensa alicantina, que no podía detener la sangría de puntos, 21-8. Rautins cerró la primera manga con un triple, ante el enfado de su técnico, que exigía más concentración en defensa y en ataque, donde ya habían perdido hasta 8 posesiones.

Lucentum Alicante no quería que se les escapase el partido y comenzó a enviar balones interiores a sus pívots. Kone limó algo las diferencias, pero Beirán, protagonista como siempre, estiró la renta por encima de la decena, 27-16. Entonces volvió Ivanov, que dominaba la zona a su antojo, controlando el rebote ofensivo y la anotación, con 10 puntos al descanso que estrecharon el electrónico, 33-26.

Una vez superada la habitual pájara del tercer cuarto, donde Lucentum Alicante se enganchó más al partido con un parcial de 0-5. Los amarillos se sobrepusieron gracias a las continuas perdidas del equipo de Txus Vidorreta, que le obligó a detener el crono para no perder la cara al choque, 42-33.

En la manga definitiva, el Gran Canaria volvió a salir algo dormido, estrellándose una y otra vez ante la defensa alicantina. Ante una diferencia de 0-6, Rey volvió a dar oxígeno en ataque, a pesar de fallar hasta 3 tiros libres consecutivos. Los amarillos Sin noticias de Ivanov tras la vuelta de vestuarios, el Alicante se mostró huérfano en ataque, acumulando hasta 21 perdidas de balón.

En los últimos minutos, un carrusel de tiros libres con Bellas como protagonista, acabo dinamitando la reacción visitante, que se marcha de vacío del CID, antes de afrontar la fase final de la Copa que se celebra la próxima semana. Ahora el Granca tiene una semana más para descansar y continuar labrando su notable mejoría en el juego.

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