Los líderes europeos buscarán hoy soluciones a la crisis de deuda de Grecia
BRUSELAS, 11 (EUROPA PRESS)
Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea celebran este jueves una cumbre informal extraordinaria en la que buscarán soluciones a la crisis de deuda de Grecia con el objetivo de evitar la quiebra del país y el contagio a otros Estados de la eurozona que han sido atacados por los mercados como España o Portugal. Alemania y Francia sopesan presentar un plan conjunto de rescate, según 'Le Monde'.
El presidente del Gobierno y presidente en ejercicio del Consejo Europeo, José Luis Rodríguez Zapatero, aseguró que la UE, y especialmente los países de la eurozona, ayudarán a Grecia a hacer frente a sus problemas presupuestarios. “Hay que ayudar a Grecia, claro que sí. Y lo va a hacer Europa y el Eurogrupo”, dijo Zapatero a la prensa a la entrada de la reunión de dirigentes del Partido Socialista Europeo (PES) previa a la cumbre.
Los líderes europeos discutirán además cómo acelerar la salida de la recesión y el ritmo de consolidación fiscal y empezarán a diseñar el nuevo plan económico de la UE para los próximos 10 años que debe sustituir a la fallida estrategia de Lisboa. La agenda incluye también un debate sobre cambio climático y sobre Haití.
La cumbre extraordinaria, la primera convocada y presidida por el presidente permanente de la UE, Herman Van Rompuy, no se celebrará en la sede del Consejo Europeo sino en la biblioteca Solvay. El objetivo es lograr que los líderes, que sólo estarán acompañados por un asesor, discutan de forma más libre en un entorno íntimo, según explicaron fuentes diplomáticas.
En la rueda de prensa final, y siguiendo lo que dicta el Tratado de Lisboa, estarán Van Rompuy y el presidente de la Comisión, José Manuel Durao Barroso, pero no Zapatero, que mantendrá un encuentro separado con los medios.
El Consejo Europeo se ha visto precedido por dos días de intensos rumores que apuntan que los países de la eurozona están diseñando un plan de rescate para Grecia, unas especulaciones que han aplacado el nerviosismo de los mercados y las caídas de las bolsas. De hecho, los ministros de Economía de los 16 Estados miembros de la zona euro, entre ellos la vicepresidenta Elena Salgado, celebraron este miércoles una videoconferencia para preparar el encuentro, pero no cerraron ningún plan concreto de rescate a Grecia, según fuentes diplomáticas.
Los líderes europeos reiterarán este jueves su apoyo “claro” a Grecia para hacer frente a su crisis de deuda. Pero a cambio pedirán al primer ministro griego, George Papandreu, nuevas garantías de que va a aplicar estrictamente su riguroso plan de ajuste presupuestario, que prevé recortar el déficit 4 puntos este año y pasar del 12,7% del PIB en 2009 hasta el 2,8% en 2012. Y le advertirán de que la UE someterá a una vigilancia reforzada las cuentas públicas griegas, según las fuentes consultadas.
“El apoyo no puede ser gratis. Eso crearía las condiciones para futuros desequilibrios y futuras crisis. El apoyo tiene que ser un apoyo claro, y tenemos instrumentos para ello, a cambio de un compromiso claro de asumir las responsabilidades, cada cual las que le corresponden”, dijo este martes el comisario de Competencia, Joaquín Almunia. El mensaje no se dirigirá únicamente a Grecia, sino que también se advertirá al resto de países de la eurozona, y especialmente a los que tienen más problemas de déficit como España y Portugal, que “el retorno a unas finanzas públicas equilibradas es fundamental”.
Precisamente, Almunia provocó una fuerte polémica la semana pasada al afirmar que España y Portugal comparten “problemas comunes” con Grecia, como la pérdida de competitividad, el alto déficit y la necesidad de financiación exterior. Las declaraciones del comisario fueron criticadas tanto por el Gobierno español como por el portugués, que rechazaron la equiparación. Al día siguiente, la bolsa española se desplomó un 6% y la portuguesa un 5%.
Lo que no está claro es si está nueva declaración política de apoyo a Grecia irá acompañada de un plan de rescate o si ello se dejará para una etapa posterior, como la reunión de ministros de Economía de la eurozona que se celebra la semana que viene. Según 'Le Monde', el presidente francés, Nicolas Sarkozy, y la canciller alemana Angela Merkel presentarán ya este jueves un plan conjunto para evitar la quiebra de Grecia.
El contenido concreto del plan -si incluirá préstamos, compromisos de préstamos, avales o promesas de suscribir las emisiones del Tesoro griego- todavía se está ultimando, aunque se descarta la emisión de eurobonos, afirma 'Le Monde', que cita una fuente próxima a Sarkozy.
“No podemos dejar caer a Grecia”, afirma la fuente. “La idea es que haya un compromiso franco-alemán fuerte, lo que no impide que después se produzcan decisiones a 27. El problema es que, entre los 27, están también Grecia, Portugal o España, países que han sido atacados. Sería curioso que estos países financien el salvamento de Grecia”, prosigue.
Francia no quiere que el Fondo Monetario Internacional (FMI) participe en el plan de rescate, aunque no excluye su asistencia técnica. También Almunia ha rechazado la intervención del FMI.
Sarkozy se reunió este miércoles en París con el primer ministro griego, Georges Papandreu, que le presentó de forma detallada su plan de ajuste para reducir el déficit por debajo del 3% en 2012. Previamente habló por teléfono con la canciller Merkel, según informó el Elíseo.
NUEVO PLAN ECONÓMICO
Además de los problemas financieros de los países de la UE y de las medidas para acelerar la recuperación, los jefes de Estado y de Gobierno comenzarán a debatir la nueva estrategia económica de la UE de aquí a 2020. Se trata de fijar una serie de objetivos comunes que impulsen una modernización del tejido productivo europeo y de diseñar mecanismos para garantizar su cumplimiento.
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha repetido que el fracaso de la estrategia de Lisboa se debe a que los objetivos que se fijaron (como aumentar la tasa de empleo al 70% de la población o incrementar la inversión en I+D hasta el 3% del PIB) no se han cumplido porque eran sólo indicativos y no vinculantes. Por ello, Zapatero defendió que los nuevos objetivos económicos deben ser vinculantes y que tienen que introducirse “medidas correctivas” para los países incumplidores.
Las propuestas de Zapatero fueron mal acogidas por Alemania y Reino Unido, que han manifestado su rechazo a cualquier tipo de sanción. Pero en su discurso ante el pleno de la Eurocámara el pasado 20 de enero, el presidente del Gobierno defendió de nuevo la posibilidad de imponer sanciones porque es una posibilidad que ya existe en la legislación de la UE, por ejemplo en el Pacto de Estabilidad y Crecimiento (PEC) y “funciona”.
Van Rompuy se ha sumado a las tesis de Zapatero y propondrá este jueves “usar los instrumentos de vigilancia que prevé el Tratado” si un país incumple reiteradamente los objetivos económicos fijados. El presidente permanente defiende además premiar a los Estados cumplidores con más fondos regionales o para I+D o con préstamos del Banco Europeo de Inversiones.
Para que la nueva estrategia no repita los problemas de Lisboa, Van Rompuy quiere fijar un máximo de 5 objetivos cuantificables de reformas estructurales y adaptarlos luego a la situación de partida de cada país.
Durante el encuentro, los Veintisiete debatirán además qué táctica debe seguir en los próximos meses la UE en las negociaciones sobre el cambio climático tras el fracaso en diciembre de la cumbre de Copenhague, en la que además la delegación comunitaria quedó excluida del acuerdo de mínimos que cerraron EEUU y China. La reunión se cerrará con una discusión sobre cómo puede la UE mejorar sus mecanismos de actuación frente a una emergencia humanitaria como el terremoto de Haití.