El Cabildo de Lanzarote aprueba el avance del Plan Insular de Ordenación
El pleno de la corporación del Cabildo de Lanzarote aprobó este martes con el voto favorable de todos los partidos políticos el Avance del Plan Territorial de la isla, tras “casi dos décadas de un planeamiento insular que ha quedado obsoleto”, según el presidente de la institución, Pedro San Ginés.
Con este documento, el Cabildo pretende diseñar un Plan de futuro volcado hacia la transformación estratégica de la isla y basado en cinco ejes fundamentales, según informa la institución insular en un comunicado.
Pedro San Ginés subrayó que “la aprobación es un motivo de felicidad para la sociedad de Lanzarote ya que, por fin, ha sido aprobada la modificación del Plan Insular de Ordenación del Territorio tras casi dos décadas de un planeamiento insular que, con su bondades y defectos, había quedado obsoleto y no daba respuestas de futuro a las necesidades de la Isla, sino que estaba resultando un impedimento para el desarrollo insular.
Sin embargo, “aún nos queda un largo camino por recorrer pero la buena noticia es que hoy ya lo hemos iniciado”, apostilló.
El redactor del Avance del Plan Territorial de Lanzarote ha sido el encargado de exponer los pormenores del documento ante el pleno de la corporación, destacando los cinco puntos que resumen el trabajo realizado.
Diversificación económica
De este modo, el documento apunta a la necesidad de establecer mecanismos de defensa contra las crisis cíclicas reduciendo la alta dependencia del turismo y avanzando hacia una mayor sostenibilidad hídrica y energética.
Por otra parte, se plantea la necesaria reactivación sostenible de sectores tradiciones como la industria y la producción agropecuaria. Y, por último, el desarrollo pausando garantizando la calidad de vida de los residentes, controlando la presión sobre el medio ambiente y manteniendo el valor de la experiencia turística.
Además de que aboga por la gestión creativa de los recursos naturales desde una lectura contemporánea del paisaje, así como la potenciación de los valores culturales y mejora de acceso al paisaje a través de las salinas (Salinas del Río, Órzola, El Agujero, El Islote y Janubio), los miradores (Mirador del Río, Mirador de Femés, Alto de las Nieves y Castillo de Santa Bárbara), y los Centros de Arte, Cultura y Turismo.
Cohesión territorial
El documento propone la necesidad de alcanzar el equilibrio y la cohesión territorial a través del fortalecimiento del sistema de núcleos tradicionales, potenciando las relaciones de complementariedad con los asentamientos turísticos del litoral.
Respecto a las infraestructuras básicas se apuesta por abordar problemas como la necesaria ampliación del sistema de desalación, las conexiones ilegales a la red de abastecimiento o la escasa cobertura de saneamiento en el norte de la isla.
En lo que a las infraestructuras de transportes se refiere, es necesario ampliar la capacidad aeroportuaria sobre la plataforma existente y potenciar el tráfico portuario. Asimismo, respecto a las infraestructuras viarias, los criterios que maneja el redactor del documento es la minimización de la red.
Por último, respecto a las dotaciones, el documento diagnostica un déficit en materia sanitaria por lo que es necesario aumentar la capacidad del Hospital Insular, así como configurar una red insular de centros integrados multifuncionales en Tinajo y Yaiza.
Responsabilidad ambiental
El documento de revisión del Plan Insular de Ordenación del Territorio apunta a la mitigación climática a través de la reducción de emisiones energéticas y por transportes; así como la adaptación climática mediante el establecimiento de pautas para la urbanización y edificación sostenibles.
Asimismo, se establecen como factores especialmente importantes la consolidación de un modelo agrario económicamente viable que permita el autoabastecimiento alimentario; la ordenación del transporte colectivo para el que se propone mejorar el sistema actual que cuenta con buena cobertura pero baja frecuencia; la producción energética local a partir de fuentes renovables y la eficiencia energética.
Reformulación del modelo turístico
En este aspecto destaca la necesidad de mejorar la cualificación de la oferta, así como evolucionar hacia una demanda de mayor poder adquisitivo.
Para ello, el redactor apunta como necesaria la recualificación de los núcleos turísticos; la adaptación a ritmos de crecimiento de Planes Especiales de Ordenación Turística; y la diversificación de usos mediante la integración en la oferta de itinerarios y elementos valiosos.