Montero afirma que personas expulsadas de Podemos votaron contra las primarias en el Círculo de LPGC
El secretario general de Podemos en Las Palmas de Gran Canaria y consejero en el Cabildo de Gran Canaria, Miguel Montero, ha afirmado que en la reciente asamblea del Círculo capitalino, que aprobó rechazar el modelo de primarias con circunscripción única por el que apuesta la dirección del partido, participó gente que “está expulsada de la organización”.
La moción aprobada finalmente por el Círculo sostiene que imponer una circunscripción única para todo el país “no se corresponde con la realidad plurinacional del Estado español, ni garantiza el derecho de participación y sufragio activo”.
Montero recuerda que abandonó la sala acompañado por varios miembros de la formación morada antes de que terminara el encuentro, en el que estaba previsto que se debatiera el modelo de primarias abierto para concurrir a las próximas Elecciones Generales y se iniciara la recogida de avales.
El motivo, según resume, se centra en que se percató de que al Círculo había acudido gente de toda la isla “con la única intención de poder ser mayoría en una asamblea de Las Palmas de Gran Canaria, para poder ganar una votación”. Algunos de los cuales contaban con expedientes abiertos o ya resueltos por los que se les había expulsado por incumplir el código ético y organizativo del partido.
“Es una perversión que gente expulsada de Podemos aproveche su apertura para ir a los círculos a intentar ganar lo que no ha ganado en su estructura interna”, insiste.
Tras plantear que dichas personas se ausentasen de la votación sin éxito y al considerar que fueron “a interferir”, decidió marcharse acompañado de “la mitad de la asamblea”. “Es un hecho triste”, apostilla.
El secretario lamenta que de esta forma, “se pervierte totalmente el planteamiento de para qué es una asamblea de un círculo”, que define como un punto de encuentro entre Podemos y la ciudadanía.
Por otro lado, considera paradójico que las mismas personas que votaron en contra del proceso de primarias pidieran a continuación avales para entrar a participar en el mismo. “Son gente que tiene una crítica hacia Podemos, que incumple sus normas, se la expulsa y luego viene a que la avalen para presentarse a las primarias”, ironiza.
Un espacio de encuentro
Aunque lamenta que se haya dado el caso de la susodicha “perversión” de una asamblea que “al final se convierte en un espacio para hablar de qué hay de lo mío”, asegura seguir creyendo en los círculos, porque “son un espacio de encuentro” y “hay muchísima gente que quiere seguir trabajando”.
Montero no habla de mecanismos para evitar que estas situaciones se vuelvan a producir en las asambleas y concluye que el Círculo capitalino adoptará sus propias decisiones, en las que él, como secretario, no puede influir.
En referencia al debate sobre el proceso de primarias, que define como el más abierto del partido, argumenta que “había gente que tenía una expectativa personal de que si el espacio de discusión era más pequeño, ahí podía colocarse”.
Montero resta peso a las decenas de cargos de Podemos en Canarias que han firmado un escrito posicionándose en contra del proceso, que cifra como una minoría y considera que “ni los cargos orgánicos, ni los públicos, estamos encima de los inscritos” en la organización.
Sin embargo, considera que el proceso de primarias “se ha explicado mal, porque había una urgencia de que se adelantasen las elecciones”.
