El PP propone un ''plan de salvación'' para el sector tomatero canario
El PP propone un “plan de salvación” para el sector del tomate de Canarias, mediante la implantación de controles fitosanitarios para evitar las plagas, el incremento de la ayuda al transporte y un programa de refinanciación de su deuda que asciende a 140 millones de euros.
Así lo anunció este miércoles el candidato del PP a la Presidencia del Gobierno canario, José Manuel Soria, tras reunirse con empresarios del sector hortofrutícola de las Islas, que expusieron la crisis que atraviesa y la preocupación existente. El asesor jurídico de la Federación de Empresarios Exportadores de Productos Hortofrutícolas (Fedex), Roberto Góiriz, advirtió de la desaparición del sector si no se actúa.
El portavoz expresó su satisfacción ante las soluciones propuestas por el PP, pues ha sabido entender los problemas del sector y plantear un plan de salvación con una serie de medidas necesarias. Góiriz recordó que esta actividad agrícola emplea en las Islas a 20.000 personas.
Soria explicó que las subvenciones al transporte deben llegar al cien por cien, de manera paulatina, y que el plan de refinanciación de la deuda debe contar con el apoyo del Gobierno regional y del central.
“Competencia muy clara” en la Península
La secretaria ejecutiva de Política Social y Bienestar del PP, Ana Pastor, también asistió a la reunión y consideró viable la propuesta de equiparar el coste del transporte al que sufraga el resto de los agricultores de España en las mismas condiciones para poder competir. En este sentido, afirmó que las ayudas consignadas en los Presupuestos Generales del Estado no se agotan, por lo que dijo que es posible incrementar la subvención actual, fijada en un 33%, al tiempo que consideró que el sector del campo debe seguir teniendo peso en la economía de las Islas.
Soria destacó la necesidad de este plan y recordó que la superficie total de cultivos de tomate ha pasado de algo más de 4.000 hectáreas a poco más de 2.000; la producción, de 370.000 toneladas a prácticamente la mitad, y el número de empresas se ha reducido, de 90 a unas 40. Agregó que las plagas se han sucedido y multiplicado en los últimos años, debido a la ausencia de controles fitosanitarios en las aduanas, y que se ha encarecido el transporte, que sólo se subvenciona en una tercera parte y sufre “una competencia muy clara” en la Península.
Góiriz señaló, además, que el detonante de la crisis que atraviesa fue el virus de la cuchara, que afectó al sector en el año 2000 y desencadenó la enorme deuda que soporta. Los costes no se han podido asumir aún, afirmó Góiriz, quien indicó que a estos problemas hay que añadir la competencia de Marruecos y otras circunstancias que han provocado este endeudamiento, que “crece a un ritmo acelerado”.
Además, criticó que “nunca ha habido una apuesta política” para este sector, que no sólo es responsabilidad de la comunidad autónoma, sino también del Gobierno central y de la Unión Europea“. A su juicio, se ha desaprovechado el carácter de región ultraperiférica del Archipiélago para lograr ciertos apoyos y diferenciarlo de las producciones del resto de España.
Destacó que las plagas, que el Gobierno autónomo contabiliza en 90, no se conocían hasta hace cinco años y son consecuencia de la falta de vigilancia. “En Estados Unidos no entra ni una flor que no reúna las condiciones fitosanitarias y aquí entra de todo”, aseguró.
La semana pasada, citó como ejemplo, entró un contenedor de piña tropical procedente de África, y la producción de esta fruta de El Hierro no se vende y han tenido que abaratar los precios.