Rubalcaba promete ''una representación importante'' de Canarias
El candidato a secretario general del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Alfredo Pérez Rubalcaba, ha prometido que si sale elegido en el Congreso de Sevilla “habrá una representación importante de Canarias en mi Ejecutiva”.
El candidato ha efectuado varios guiños a los socialistas canarios durante el encuentro que ha mantenido esta tarde en Santa Cruz de Tenerife y, por ello, ha asegurado que “es necesario tener una coordinación” entre la dirección federal y la canaria para abordar las “singularidades” de las Islas, con “reuniones periódicas cada pocos meses, aquí y allí”.
El candidato a suceder a Rodríguez Zapatero al frente del socialismo español ha afirmado que “hemos hecho muchas cosas por Canarias que no se han percibido porque no hemos sabido explicarlas bien”.
“Canarias es muy importante para el PSOE, pero ahora más”, afirmó Rubalcaba, aunque no explicó por qué.
“Me precio de querer a Canarias”
Con todo, insistió en que “me precio de querer a Canarias” y de “conocer sus singularidades”, recordando que durante su etapa al frente del Ministerio de Interior, tuvo que colaborar para solucionar la “avalancha de inmigración terrorífica que golpeaba las conciencias pero también creaba enormes dificultades de integración”.
En sus reflexiones a los militantes congregados en Tenerife Espacio de las Artes (TEA) de la capital tinerfeña. Rubalcaba insistió en que los socialistas deben defender la bonificación de las tasas aéreas que el ministro “de aquí”, en referencia a José Manuel Soria, “no quiere aprobar”.
“Vamos a seguir defendiendo desde la oposición nuestras políticas en Canarias, no hemos estado ajenos a la reforma del REF, a las ayudas para las regiones ultraperiféricas, reconociendo sus singularidades en los convenios importantísimos, suscritos” por los gobiernos socialistas, tanto los de Felipe González como los de Rodríguez Zapatero.
Proceso de reflexión
Rubalcaba comenzó confesando que la técnica de hablar caminando es natural en su persona.
“Soy un culo inquieto, pero ese titular no me interesa”, aseguró para conseguir la complicidad del auditorio al conseguir que aflorara la risa en el aforo.
“Esto no es un mitin sino un proceso de reflexión compartida para salir de una situación muy difícil. Aunque conviene mirar hacia atrás para comprobar que el PSOE ha salido de situaciones mucho más difíciles”, aseguró.
Aseguró que los españoles “no han confiado en nosotros para salir de la crisis”, pero dijo que “existe un programa” que habrá que confrontar desde una “oposición útil” con el Gobierno, al que acusó de “utilizar la crisis para su particular ajuste de cuentas con el Estado del Bienestar”,
Aunque reconoció que existe una necesidad de replantear la socialdemocracia, y que “hay un proyecto socialista europeo que está por definir”, recordó que la situación actual es culpa del capitalismo y las teorías neoliberales más extremas.
“Que se refunde el capitalismo, que empiecen ellos”, afirmó.
Sin 'rubalcabismo'
En cuanto al proceso congresual abierto, ell candidato quiso dejar claro en su mensaje que para afrontar el futuro se necesita unidad y apostar por la militancia.
“No es un congreso entre Carme y Alfredo, sino de ideas, y el partido no puede renunciar al talento de ninguno de sus militantes. Os pido que no votéis contra nadie sino que toméis partido solo por el partido”, insistió.
Un PSOE que, si él lo lidera a partir del Congreso de febrero, debe ser “intergeneracional, de mayorías y con un 53% formado por mujeres”.
“Conmigo de secretario general no va a haber 'rubalcabismo', no va a haber los unos y los otros. Todo aquel que tenga ideas, y que tenga ganas, podrá trabajar en el partido”, insistió Rubalcaba.
El candidato ha defendido su pasado, tanto como militante activo como en sus labores ministeriales, y aseguró que se presenta a secretario general “por lo mismo que entré en el partido, para ser útil a la sociedad en un partido que puede transformarla”.
Reconoció que el PSOE ha perdido dos elecciones en menos de un año, pues “soy profundamente autocrítico”, aunque enarboló su derecho a “estar muy orgulloso por haber sido ministro de Felipe [González] y José Luis [Rodríguez Zapatero]”.
“Sé que algunas hice mal, pero hay que decir siempre la verdad, y sabéis que algunos disgustos me ha traído cuando era portavoz. Si me votáis quiero que lo hagáis como soy”, concluyó.