Canarias pide ''la misma diligencia'' con las renovables que con el gas
La viceconsejera de Industria del Gobierno de Canarias ha celebrado el desbloqueo por parte del Gobierno central de las obras de la planta regasificadora que se ubicará junto al puerto de Granadilla, en Tenerife. Francisca Luengo ha pedido al ministro de Industria y Energía “la misma diligencia o mayor” en la implantación en Canarias de un régimen específico en materia de energías renovables. “Canarias se lo merece”, ha dicho durante su intervención en el programa Tiempos Modernos que presenta Carlos Sosa en CANARIAS AHORA RADIO.
En el mismo sentido se ha pronunciado el alcalde de Agüimes, Antonio Morales. El municipio acogerá, previsiblemente, la nueva planta regasificadora de Gran Canaria. Para ello, el Cabildo deberá aprobar primero la nueva planificación insular que de carpetazo definitivo a la ubicación de la central y cuya tramitación se demorará seis meses más, según aseguró ayer el presidente, José Miguel Bravo de Laguna. Morales, que se ha opuesto firmemente a la implantación del gas, ha pedido que se incluya el planeamiento de renovables: “Si pusiésemos en marcha la central de Chira-Soria y un gran parque eólico marino acabaríamos con los problemas energéticos de Canarias”.
Pese a que Luengo ha insistido en que las dos regasificadoras proyectadas en las islas producirán un ahorro de hasta 350 millones de euros en el archipiélago, Morales ha replicado en el mismo programa radiofónico que se trata de “un ahorro para el conjunto del Estado, no para Canarias”. “No se está contando con la amortización de las dos plantas y las obras de los puertos”, ha insistido.
Con respecto a los primeros días del líder popular en las islas al frente de la cartera de Energía, el alcalde del municipio grancanario ha asegurado que “ya empiezan a observarse indicadores de frustración”. “La primera medida es desbloquear un tema para favorecer a las grandes empresas que sostienen las nucleares”, ha comentado, en referencia a la revocación del cierre de la central nuclear de Garoña, que debía dejar de funcionar en 2013.
Luengo ha pedido nuevos “retos cada vez más ambiciosos” en materia de energías renovables. El objetivo: “Que lleguemos a la media nacional o, por lo menos, esa meta ambiciosa que es el 30% en 2015”, ha dicho. Para Morales, sin embargo, el futuro se plantea incierto: “La democratización en la energía va en contra de los grandes oligopolios”, ha insistido.
