Desarticulada una banda internacional acusada de cometer hasta 44 robos en las Islas
El Equipo Contra el Crimen Organizado de la Guardia Civil (ECO) de la Comandancia de Santa Cruz de Tenerife, con el apoyo del ECO de Barcelona, ha dado por terminada la operación Adriático Norte, que ha culminado con la detención de una banda internacional formada por nueve personas entre Tenerife y la Ciudad Condal, y el esclarecimiento, hasta el momento, de 44 robos cometidos en naves industriales y establecimientos comerciales en Tenerife y La Palma, así como la incautación de hasta medio millón de euros y un considerable arsenal de armas.
Según informó este jueves ante los medios el subdelegado del Gobierno en la provincia tinerfeña, José Antonio Batista, quien estuvo acompañado por el general jefe de la Zona de la Guardia Civil en Canarias, Miguel Martínez, y el teniente coronel jefe de la Comandancia de la Guardia Civil en Tenerife, Ricardo Arranz, los robos se realizaban de manera “rápida y precisa”, al tiempo que mostró su satisfacción por el éxito de esta operación policial que tildó de “complicada pero muy brillante”.
La operación Adriático Norte se inició hace aproximadamente un año cuando diferentes puestos de la Guardia Civil en la isla de Tenerife y en La Palma empezaron a recibir denuncias por robos en polígonos industriales como Las Chafiras, Güímar, Tacoronte, El Paso, Santa Cruz de La Palma, Los Llanos, entre otros.
En este sentido, el general jefe de la Guardia Civil en Canarias explicó que todos los robos tenían un denominador común, y era actuar de forma masiva en varias naves o comercios, previamente identificados, en una misma noche, especialmente en puentes y festivos, logrando robar en tres o más establecimientos comerciales en cada golpe. De hecho, en casos como en el Polígono de Las Chafiras (Tenerife) lograron realizar hasta seis robos en un mismo día.
“A su vez, -continuó Martínez- se denotaba que poseían un alto grado de conocimiento en sistemas de alarmas, que inutilizaban de forma sistemática, y utilizaban herramientas de precisión que permitían actuar con rapidez en los asaltos. En algunos casos, lograban realizar en establecimientos comerciales oquedades -los conocidos butrones- en sus paredes de división, siendo su único objetivo apoderarse del dinero, el cual se llevaban 'reventando' las cajas de caudales existentes en las empresas”.
Transcurso de la operación
En el transcurso de la operación, que tuvo una duración aproximada de seis meses, se logró identificar a varias personas, en un principio sospechosas, en su mayor parte procedentes de países del Este de Europa, y que residían principalmente en el Norte de Tenerife, en concreto, en Puerto de la Cruz. Asimismo, se comprobó que mantenían diferentes contactos con otras personas residentes en la Península, en especial en Barcelona, donde fueron detenidas dos personas, pero también en Grecia e Italia, según argumentó el general jefe de la Benemérita.
Asimismo, los agentes de la Guardia Civil detectaron la alta especialización y peligrosidad de los investigados. Tal es así que en los registros realizados se encontró un arma de guerra (un AK-47), dos pistolas y chalecos antibalas, lo que motivó en los cuatro registros domiciliarios realizados en Tenerife se contara con el apoyo de un Grupo Rural de Seguridad (GRS) especialistas en asaltos.
En total, se realizaron cinco registros domiciliarios durante la madrugada del pasado martes, cuatro en el Puerto de la Cruz y uno en la provincia de Barcelona. En el caso del primero se hallaron 10.000 euros en efectivo, material informático y electrónico, 20 teléfonos móviles, 4 intercomunicadores radio-teléfonos, diversas herramientas, un chaleco antibalas, documentación relacionada con inhibidores de alarmas y sistemas GSM, cámaras fotográficas, entre otros objetos.
En la Ciudad Condal se incautaron dos pistolas automáticas, un fúsil de asalto, material informático y electrónico, vestimenta empleada en los asaltos, 5 teléfonos móviles, una katana, un chaleco antibalas, herramientas, así como documentación falsificada.
Tras los registros, se procedió a la detención de nueve personas, siete varones y dos mujeres, con edades comprendidas entre los 22 y los 36 años de edad y oriundos de Kosovo, República Checa, Tenerife, Suecia, Eslovaquia, Albania y Rumanía. A este respecto, el general jefe de la Guardia Civil en Canarias subrayó que es la primera vez que una banda o grupo organizado de esta índole lleva a cabo una operación como la que se ha producido a lo largo del último año.
'Modus operandi'
En cuanto al modus operandi, debido a la gran movilidad que tenían los integrantes del grupo y su estructura jerárquica, con carácter previo se desplazaban a diferentes polígonos o áreas industriales de todo el archipiélago donde realizaban el estudio previo de sus objetivos para verificar las posibles salidas, huidas alternativas, alarmas existentes, vigilancia privada de seguridad, iluminación, etcétera.
Una vez que el jefe o responsable de la banda decidía el lugar objeto del robo, miembros del grupo realizab labores de vigilancia, incluso intercomunicados con transmisiones, mientras que otros se introducían en los inmuebles, todo ello a través del procedimiento del 'butrón' o fracturando las puertas o ventanas. Previamente, inutilizaban las alarmas, así como las cámaras de seguridad. Una vez cometido el delito, un vehículo realizaba funciones de lanzadera para advertir una posible presencia policial.
De las investigaciones realizadas se les imputa la comisión de 44 robos en comercios y establecimientos cometidos en Tenerife y La Palma, así como también se les acusa de los delitos de asociación ilícita, falsedad documental y blanqueo de capitales.
Finalmente, si bien todavía no se ha cuantificado exactamente el dinero sustraído y los daños causados, supera el millón y medio de euros. Además, los agentes han detectado en la documentación ya analizada que parte del dinero robado era remitido mediante giros a familiares de los detenidos que residen en sus países de origen.