Casi 100 operarios trabajan para atenuar los efectos del fuerte oleaje

El Ayuntamiento de Santa Cruz ha movilizado a casi un centenar de operarios para paliar, los efectos que la pleamar ha provocado en distintas partes del núcleo costero de San Andrés desde la madrugada del pasado lunes.

El alcalde de Santa Cruz, José Manuel Bermúdez, ha agradecido a todos los vecinos su actitud y buena predisposición para colaborar en las labores de limpieza y adecuación de la zona afectada, así como también ha sido consciente de los esfuerzos realizados por los servicios municipales de limpieza (Urbaser), aguas (Emmasa), obras (Dragados), Policía Local, Protección Civil y demás colectivos que han ayudado desde la madrugada del pasado lunes a restablecer la normalidad en San Andrés, según ha informado el Ayuntamiento de Santa Cruz en una nota de prensa.

En cuanto a la compañía Urbaser ha proseguido en la zona con un dispositivo especial de limpieza que ha tenido como principal objetivo el desescombro de las calles y vías afectadas por los materiales arrastrados por las distintas pleamares que han llegado al núcleo de San Andrés. Así, un equipo compuesto por 16 personas (12 peones, tres conductores y un coordinador) han sido los encargados de realizar las tareas de limpieza utilizando una pala mecánica, una cisterna de baldeo, dos camiones con equipo gancho porta contenedores, un dumper, etc. Este retén relevó a primera hora de la tarde al equipo que realizó las mismas labores en horario matinal y que estuvo compuesto por 47 personas.

Hasta el momento, el personal de Urbaser ha trasladado hasta el Complejo Medioambiental de Arico un total de 60 toneladas de escombros y materiales de arrastre arrojados durante las pleamares a la avenida Marítima de San Andrés y sus aledaños.

Policia y Protección Civil

La Policía Local, desde la activación del dispositivo, a las 00:40 horas del pasado lunes, ha trabajado ininterrumpidamente con un mínimo de una docena de agentes; aunque en momentos puntuales se ha llegado a la veintena. Los diferentes grupos operativos, con el apoyo incluso de la Unipol estas dos últimas jornadas, se han centrado en garantizar la seguridad de las personas, regular el tráfico y controlar el acceso de vehículos a la zona, además de dar cobertura al trabajo de los distintos servicios municipales.

La colaboración con los vecinos en cuanto a medidas preventivas, información y gestión de los recursos ha sido fundamental estos días. También la grúa municipal desempeñó una labor importante en los primeros momentos, tratando de retirar de la zona del Castillo a los vehículos estacionados que estaban afectados por la entrada del mar rescatando un total de 7 coches.

Como apoyo al trabajo de los agentes el servicio concesionario de la empresa Lumican de vallas y señalización también ha aportado su labor y recursos en esta situación. Han sido utilizadas más de 50 vallas para proceder a los diferentes cortes de tráfico, la reorientación de la circulación que han sido necesaria para acceder al pueblo y a las zonas de El Suculum e Igueste de San Andrés; del mismo modo unos 150 conos se han utilizado para segregar la circulación de la TF-11, autovía de San Andrés a la altura del Oceanográfico.

Respecto a la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil del municipio ha permanecido activa, siempre con un número no inferior a 20 integrantes, desde la mañana del pasado lunes. Con recursos como las motobombas han colaborado en el achique del agua existente en viviendas y establecimientos de restauración. Además, su trabajo ha sido fundamental para garantizar la cobertura y atención a los habitantes de El Suculum e Igueste, llegando a tener que utilizar el microbus de transporte para llevar a sus domicilios a muchas personas que no podían pasar a estos enclaves con sus vehículos.

Obras y servicios

La compañía Dragados ha sido la encargada de desarrollar, principalmente, las tareas de desescombro y limpieza del barranco de San Andrés, con el fin de intentar que la zona del Castillo no quedase anegada por el efecto de las pleamares. La principal dificultad con la que se han encontrado es que los materiales de arrastre que trae la marea obstruyen el cauce e impiden que el agua retorne nuevamente al mar. Por esa razón, los nueve operarios realizan esas labores con la ayuda de una retroexcavadora y dos camiones grúa.

Del mismo modo, también repartieron 300 sacos de arena entre los vecinos que tenían la puerta de su vivienda en las zonas más próximas a la costa y se instalaron ocho barreras del tipo New Jersey (realizadas en hormigón como las de la mediana de la autopista) para disponerlas delante de los establecimientos comerciales con el fin de evitar su inundación con la crecida de la marea.

Agua

La red de saneamiento (alcantarillado) de San Andrés ya se encuentra plenamente operativa. Hacia las 00.30 horas, la estación de bombeo de San Andrés, que opera la red de alcantarillado de todo el núcleo, recuperó el fluido eléctrico y pudo comenzar a funcionar. Dicha instalación había quedado inundada y su suministro eléctrico interrumpido desde las 20.30 horas del pasado lunes a causa del fuerte oleaje y la elevada pleamar.

El suministro de agua no se vio afectado en ningún momento, aunque Emmasa solicitó a los vecinos de San Andrés que hicieran un uso restringido del alcantarillado público para reducir a un máximo razonable la utilización de las instalaciones sanitarias de sus hogares hasta que la estación de bombeo recobrase su funcionamiento habitual.

Durante la jornada del pasado martes, dos cuadrillas de Emmasa integradas por técnicos y operarios trabajaron en San Andrés para limpiar a fondo las redes de alcantarillado que, aunque se encuentra en condiciones operativas, todavía sufre en su interior una inhabitual acumulación de lodos y detritus. Emmasa confía en que la red de saneamiento recuperará la situación previa a las pleamares en las próximas 72 horas.

Por último, los técnicos y operarios de Emmasa se dedicarán al reacondicionamiento de la instalación de la estación de bombeo de San Andrés, inspeccionando y corrigiendo los desperfectos que la inundación haya podido producir en la misma.