El 90% de los pinos centenarios de Inagua sobrevivieron al fuego
El fuego declarado en Gran Canaria, y que aún no se considera oficialmente extinguido, arrasó el 10% de los pinos centenarios de la reserva de Inagua, informó este martes el consejero de Medioambiente del Cabildo de Gran Canaria, Juan Salvador León.
El responsable insular agregó, tras mantener una reunión de coordinación de ayudas y acciones con los responsables del Gobierno canario, que a pesar de los daños confía en la recuperación del paraje, pues la naturaleza es “sabia”.
Juan Salvador León se mostró esperanzado porque aún queda el 90% de los pinos centenarios, dijo, y porque se ha podido comprobar que el pinzón azul, ave en peligro de extinción, no ha desaparecido con el incendio, pues de 34 ejemplares marcados se ha visto 20 sobrevolar las áreas afectadas.
A juicio del consejero las instituciones no han sabido hacer llegar a la población la magnitud del fuego y las extremas condiciones que lo convirtieron en un gran incendio.
Los técnicos sólo han encontrado dos ejemplos similares en el mundo, y son los fuegos que se produjeron en California y Australia, que en ambos casos se cobraron vidas humanas.
Temperaturas de 45 grados de madrugada y una sequedad de hasta el 96% en una isla como Gran Canaria era “impensable”, y sin embargo se dieron aquellos días junto a vientos racheados de más de cien kilómetros por horas.
Por eso, aunque considera que el incendio debe marcar “un antes y un después” para reconocer errores y aprender de él con el fin de no permitir que vuelva a alcanzar tanta magnitud, insistió en que era necesario impedir que las personas evacuadas regresaran a sus casas porque, si bien es comprensible que quisieran salvar el trabajo de toda una vida, el objetivo era evitar pérdidas humanas.
Además, Juan Salvador León aseguró que el fuego que se produjo en Gran Canaria “no se apagaba con una manguera de jardín” y los técnicos insisten en que “se hicieron los cortafuegos que se tuvieron que hacer”.
''La población debe estar agredecida''
Asimismo, considera que la población grancanaria debe estar agradecida con el personal que intervino en el control del fuego, pues a pesar de que a partir de los 50 grados centígrados los sistemas de los helicópteros pueden empezar a fallar y es peligroso volar con vientos fuertes, “ahí estaban”.
El responsable insular considera que hay que abrir un debate y replantearse el modelo de gestión de las áreas rurales y protegidas, y aseguró que una de las medidas será acercar la administración a los agricultores de los municipios alejados, así como recuperar la figura de agentes para dar y recoger información.
El viceconsejero de Medioambiente del Gobierno canario, Cándido Padrón, explicó por su parte que el encuentro celebrado este martes tuvo como objetivo ahondar en la coordinación de esfuerzos, para lo que se han producido varios encuentros.
En esta ocasión se ha decidido “municipalizar” las acciones para firmar convenios con los ayuntamientos afectados, aunque la cuantificación de los trabajos se tratarán en un nuevo encuentro convocado para la próxima semana.
En cualquier caso, detalló que se emprenderán acciones en la corona forestal, para lo que se precisa personal especializado, y en los barrancos y canales, además de en núcleos poblacionales cercanos al monte.
Ambos responsables celebraron que diversidad de voluntarios y entidades, hasta 48, hayan contactado con la Administración para colaborar en las labores de recuperación, lo que demuestra que la población está concienciada con la necesidad de conservar el medioambiente, subrayó Juan Salvador León.
El consejero autonómico agregó que el objetivo es sumar la colaboración de colegios, institutos, organizaciones juveniles y de mayores para así “devolver a la naturaleza lo que ha perdido por la mano del hombre”.