El profesorado contratado en Canarias por la pandemia finaliza su contrato el 30 de junio

El profesorado contratado por la pandemia finalizará su contrato el 30 de junio, sin garantías de volver a ser empleados el próximo curso hasta confirmarse los protocolos sanitarios que se establecerán, según ha informado este martes la consejera de Educación, Universidades, Cultura y Deportes, Manuela de Armas.

Manuela de Armas, en el pleno del Parlamento, ha hablado de los 2.568 docentes contratados para ocuparse del protocolo sanitario “de manera temporal y vinculados a la evolución de la pandemia”. 1.851 de estos docentes corresponden a Educación Secundaria y otros cuerpos (profesorado técnico de Formación Profesional y Escuelas Oficiales de Idiomas, entre otros), y 717 a Infantil y Primaria. Estas cifras posicionaron a Canarias en una de las comunidades autónomas del territorio español que más incrementaron su personal docente.

Armas ha confirmado que una vez finalice el periodo lectivo el 30 de junio estos profesores finalizan su contrato, al tiempo que ha señalado que aún se desconoce el protocolo que se aplicará el próximo curso y cuántos docentes serán necesarios. Armas avanzó que las cifras de maestras y maestros y profesorado de refuerzo para afrontar el nuevo periodo lectivo se conocerán en el mes de julio.

Aunque Canarias se encuentra “perfectamente” en la media nacional en cuanto a los ratios profesores alumnos, Canarias necesita más docentes para la atención a la diversidad y el refuerzo, ha admitido la consejera.

Manuela de Armas ha respondido así al ser preguntada por el grupo Nacionalista Canario sobre la previsión de abonar el salario durante los meses de julio y agosto de 2021 al profesorado que fue nombrado con motivo de la COVID-19.

El diputado del grupo Nacionalista Canario Oswaldo Betancort ha valorado el trabajo de los profesores, que han estado “en primera línea” en la pandemia, periodo en el que ha aumentado la calidad educativa al aumentarse los ratios en las aulas.

El nacionalista le ha pedido al Gobierno “un último esfuerzo” y que cuente con los 2.568 docentes contratados como refuerzo, a quienes no sería justo que no les pagaran sus salarios durante el verano, al finalizar su contrato, a pesar de que han tenido la misma carga de trabajo que el resto de docentes.