El público ya no sabía qué piropo lanzar el miércoles a la brasileña María Bethânia a lo largo de su actuación en el auditorio Alfredo Kraus, en el seno del festival Arrecife de las Músicas. La artista dio un concierto total, con enorme contundencia, con entrega absoluta y con la profesionalidad exigible a este tipo de estrellas. El público lo supo apreciar y también se entregó. Con Bethânia, Arrecife de las Músicas entró en su exitosa recta final, que tendrá este viernes, con Jan Garbarek, un colofón de auténtico lujo. Por cierto, el que se haya perdido a la Bethânia, todavía tiene una oportunidad, verla este sábado, a las nueve de la noche, en el Auditorio de Tenerife. Sus dos únicas actuaciones en España han sido en las Islas, lo que motivó que muchas personas de la Península se hayan desplazado hasta aquí para renovar sus votos marianos.