La Fiscalía pide internar en un psiquiátrico al acusado de incendiar un apartamento en Las Canteras
La Fiscalía ha pedido este martes a la Audiencia de Las Palmas una condena de 15 años de internamiento en un centro psiquiátrico al enfermo mental acusado de incendiar de madrugada en 2012 el apartamento en el que residía, situado en un edificio de Las Canteras, unos hechos que el procesado ha negado.
En el juicio que se ha celebrado contra S.G.M., quien sufre esquizofrenia paranoide desde los 22 años, éste ha manifestado al tribunal que es inocente y ha explicado que ese día, el 27 de mayo de 2012, cuando salió de la cocina vio una llama en el salón, y que él cree que el incendio se originó debido a un cigarrillo encendido que pudo caer en un sillón.
Así mismo, ha admitido que en esa época estaba medicado, pero no seguía el tratamiento con regularidad, y que fumaba cannabis, algo que aún sigue haciendo.
La médico que le trata ha señalado que fuma esa droga bajo control, pero los peritos forenses han advertido de que puede agudizar un brote psicótico si el consumo es abundante.
La fiscal Montserrat García ha considerado que ha quedado probado el delito de incendio que se imputa a S.G.M., al que reconoce que tenía las facultades anuladas en el momento de los hechos.
Así mismo, ha destacado que ante la peligrosidad y probabilidad de que cometa un crimen expuesta por los peritos forenses es recomendable que ingrese en un centro en régimen cerrado.
La acusación particular ejercida por la compañía aseguradora del edificio, Catalana Occidente de Seguros, se ha adherido a la petición de la Fiscalía, que también reclama al acusado el pago de una indemnización de 14.356 euros por los daños generados, ha indicado el abogado Iván Ventura.
El abogado de la defensa, Roberto Javier Orive, ha solicitado la absolución del procesado, ya que, al contrario que las acusaciones, entiende que no existe prueba objetivable sobre la autoría de su defendido, pues el informe pericial elaborado por la Policía en 2012 nunca llegó a completarse con unas conclusiones.
Los peritos han explicado al tribunal que el incendio fue provocado y que se hallaron dos focos, uno en una venta y otro en el centro del apartamento. Aunque no halló acelerante alguno, la Policía científica cree que se precisó de una fuente de calor como detonante.
Los expertos han sostenido que, en principio, una colilla no sería suficiente para originar un fuego como ese, al ser preguntados por esa posibilidad por la defensa, ya que el acusado ha explicado que el cree que pudo ser un cigarrillo encendido la causa del incendio.
El abogado defensor ha reclamado que, en caso de que el tribunal lo considere autor del fuego a su cliente, no se opte por su internamiento en un centro psiquiátrico cerrado, sino que se adopten las medidas para que el acusado esté bajo la tutela de la sala.
Orive ha manifestado que sería “desproporcionado” una medida en régimen cerrado por la evolución favorable que ha experimentado el acusado desde que ocurrieron los hechos y porque resultaría perjudicial para el enfermo, que sufriría un retroceso en los avances que se han logrado, como así lo ha expuesto la psiquiatra que lo atiende en el centro sociosanitario El Pino.
La médico ha informado que, aunque conoce al paciente desde hace años, lo trata desde 2014, cuando ingresó en el centro de El Pino, y ha asegurado que “en absoluto” es peligroso y está “totalmente estabilizado”, además de controlado para que cumpla con la medicación pautada, que precisa para su enfermedad, que se ha tratado de manera continua desde que ocurrieron los hechos.
La psiquiatra ha sostenido que el acusado “no precisa más medida ni mejor” que la que ya recibe en este centro, del que puede salir con autorización.
