La Diputación Provincial de Cuenca disolverá el Consorcio Provincial de Bomberos 'Cuenca 112' y el Consorcio de Medio Ambiente (Consorma), creados en el año 2000 para prestar los servicios de extinción de incendios y gestión de residuos sólidos urbanos, y asumirá desde este año la prestación directa de dichos servicios en los municipios conquenses. Según informa en un comunicado, de esta manera adapta la situación de estos servicios a la normativa, tras la reforma del año 2013 de la Ley 7/85 reguladora de las Bases de Régimen Local.
Atribuye por tanto como competencia propia de la Diputación el servicio de prevención y extinción de incendios en los municipios de menos de 20.000 habitantes, así como la prestación del servicio de tratamiento de residuos en los municipios de menos de 5.000 habitantes o una función coordinadora de servicios mínimos en los municipios de menos de 20.000 habitantes, entre los que se encuentra la recogida y tratamiento de residuos.
Unos servicios en los que, a pesar de ser una competencia propia de las diputaciones tras la reforma de la Ley Local del Gobierno de Rajoy, seguían colaborando económicamente los ayuntamientos con una aportación a dichos consorcios. Lo que no aclara la comunicación emitida por la Diputación es si los consistorios dejarán de aportar las cuantías económicas como hasta ahora.
La Diputación que preside el 'popular' Benjamín Prieto señala que busca una prestación “más eficaz” de estas competencias básicas a los municipios de la provincia, puesto que “toda la maquinaria administrativa” de la institución provincial, desde Contratación hasta Intervención pasando por los Servicios Técnicos y Jurídicos, estarán a partir de ese momento a su servicio. El personal de ambos consorcios, un total de 67 trabajadores, se integrará en la plantilla general de la Diputación Provincial, lo que “simplificará el entramado administrativo actual otorgando una mayor operatividad a la institución”.