Ucrania ha pedido este lunes a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) –el órgano judicial principal de las Naciones Unidas– que imponga medidas cautelares para detener las hostilidades en su país. La audiencia, en la que la parte ucraniana ha presentado sus argumentos orales y a la Rusia no se ha presentado, ya ha concluido en La Haya y el tribunal iniciará sus deliberaciones.
Ucrania ha asegurado que Rusia está malinterpretando la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio, debido a que Moscú ha justificado la invasión en base a un presunto genocidio en las regiones ucranianas de Donetsk y Lugansk del que no ha presentado pruebas.
Según informa Reuters, el tribunal ha dicho que se pronunciará “lo antes posible”. En una nota de prensa indica que la decisión se anunciará en una sesión pública cuya fecha se anunciará “a su debido tiempo”. Está por ver si Moscú acata una eventual orden de la CIJ –los países suelen seguirlas, aunque no siempre, y son legalmente vinculantes, pero el tribunal no tiene medios reales para hacerlas cumplir–.
“Resolvamos nuestra disputa como naciones civilizadas. Depongan las armas y presenten sus pruebas”, ha dicho Anton Korynevych, representante ucraniano. “Ucrania respeta a este tribunal y sigue sus órdenes. Rusia también debe hacerlo”.
Escribe Icíar Gutiérrez.