Ecologistas en Acción La Rioja ha trasladado al Defensor del Pueblo una queja contra la modificación de la Ley de Biodiversidad porque consideran que es contraria al interés de las riojanas y riojanos, a su salud, al medio ambiente y además contiene posibles invasiones competenciales por ir contra la la legislación básica estatal en materia medioambiental y es contraria al marco institucional.
La queja, presentada el pasado mes de julio pide al Defensor del Pueblo que interponga un recurso ante el Tribunal Constitucional por la aprobación por el Parlamento de La Rioja de la Ley 2/2025, de 23 de mayo, por la que se modifica la Ley 2/2023, de 31 de enero, de biodiversidad y patrimonio natural de La Rioja, que fue presentada como proyecto de ley por el Gobierno de La Rioja.
Su queja la fundamentan en varios puntos. Así, consideran que el proyecto de Ley que se aprobó supone, “el mayor atentado jurídico producido contra la biodiversidad riojana desde que se constituyó la Comunidad Autónoma de La Rioja”. Porque aseguran que “no se trata de una Ley propositiva o que aporte mejoras al texto de la misma y que favorezca la conservación de la biodiversidad sino más bien al contrario, elimina los aspectos más relevantes y significativos de esta Ley”.
Además recuerdan que la Ley 2/2025, de 23 de mayo, modifica la Ley 2/2023, de 31 de enero, de biodiversidad y patrimonio natural de La Rioja, en su artículo único y “elimina del articulado de la Ley 2/2023 la totalidad de las disposiciones relativas a la integración de la conservación y restauración del medio natural en las políticas sectoriales”. Y estos cambios aseguran que responden a la “clara intención de eliminar la necesidad de que el desarrollo se adapte a condicionantes medioambientales y de conservación de la naturaleza y de no creer en un desarrollo sostenible y armónico”.
Asimismo, la entidad ecologista alerta de que se cambia de listado a “registro riojano de especies silvestres en régimen de protección especial y se desprotege 242 especies riojanas, ”desprotegiendo así nuestra biodiversidad, dificulando el derecho de la ciudadanía a contar con informción ambiental e impidiendo el derecho a la tutela judicial efectiva recogida en la Constitución“. Se están excluyendo expecies, añaden, ”de flora, fauna, invertebrados y vertebrados que llevan protegidas en España desde 1902 como las aves insectívoras, o desde 1966 como las aves rapaces, o desde 1981 como los murciélagos“. En concreto, las 242 especies protegidas son: 185 especies de aves; 20 especies de mamíferos (incluido el lobo); 17 especies de reptiles; 7 especies de anfibios; 1 especie de pez; 8 especies de invertebrados (3 coleópteros, 2 mariposas, 1 libélula, 2 moluscos).
Otro de los argumentos de la entidad ecologistas es que se retira al lobo del Listado Riojano de Especies protegidas y se abre la posibilidad de ser considerado como especie cinegética “sin ningún tipo de argumentación científica o técnica y sin valorar la posibilidad de coexistencia entre ganadería extensiva y lobo en base a arbitrar medidas de prevención eficaces y al pago rápido y suficiente de los daños”. Consideran que el lobo debería ser “una especie protegida en La Rioja porque la Comunidad Autónoma es uno de los frentes de expansión de la especie hacia el este a través del Sistema Ibérico y se trata de una especie singular que cumple una función ecológica fundamental en el ecosistema como depredador apical y controlador de enfermedades epizoóticas que afectan a los ungulados silvestres y al ganado”.
De igual forma denuncian que esta Ley levanta la prohibición de uso del veneno de glifosado para usos no agrícolas, poniendo en peligro la salud de los riojanos y de los ecosistemas. “Se favorecen las graves consecuencias que su uso puede acarrear relacionadas con la salud pública y de los ecosistemas, la contaminación de acuíferos, el riesgo para los mamíferos herbívoros, el descenso de polinizadores y la afección a cursos de agua y organismos acuáticos”. Ecologistas en Acción La Rioja recuerda que el glifosato es un herbicida calificado en 2015 por la OMS como probablemente cancerígeno para el ser humano y que la UE recomienda reducir su comercialización al máximo e incluso que se prohíba en zonas sensibles. Sin embargo, “el Gobierno de La Rioja elimina las limitaciones de uso no agrícola del glifosato”.