Un incendio de vegetación en Torrelodones ha obligado a evacuar varias viviendas de Las Marías, una urbanización perteneciente a este municipio madrileño. Según traslada 112 Comunidad de Madrid, los desalojos se han producido debido al posible efecto del humo en los residentes más próximos al fuego.
Sobre el terreno han estado actuando hasta 14 dotaciones del cuerpo de Bomberos de la Comunidad de Madrid, efectivos de las Brigadas Forestales y cuatro helicópeteros que han llevado a cabo labores de extinción aéreas.
La rápida intervención de estos efectivos ha evitado que las llamas alcancen las casas evacuadas, según traslada la agencia de seguridad y emergencias autonómica. Así, las autoridades han derivado a los vecinos del entorno fuera de sus casas para evitar posibles afecciones por la inhalación de humo.
El incendio se ha dado por controlado tras afectar únicamente a vegetación y los vecinos de la urbanización Las Marías evacuados han comenzado a regresar a sus casas, según ha informado Emergencias 112 Madrid. Pese a haberse dado por controlado, en el lugar continuarán trabajando efectivos de bomberos y brigadas forestales de la Comunidad de Madrid hasta su total extinción.
La alcaldesa de la localidad madrileña, Almudena Negro, había señalado a través de su cuenta de X a las 16 horas que “el fuego en Las Marías está a estas horas estabilizado”. Puntualiza que están afectadas por el fuego “cinco parcelas de las viviendas, no las viviendas” y adelanta que “aún no se conocen las causas”.
La situación se suma al incendio que ha asolado otro municipio madrileño, Tres Cantos, desde última hora de la tarde del lunes. Un fuego que ha arrasado 2.000 hectáreas, deja una víctima mortal y provocó el desalojo de 180 personas. En el contexto nacional, se suceden los focos activos por todo el país, con especial incidencia en Castilla y León y en la provincia de Ourense.
El incendio de Tres Cantos ha sido controlado en la mañana de este miércoles, después de una noche en la que las condiciones meteorológicas han disminuido su agresividad con menos viento y temperaturas algo más bajas, aunque todavía permanecen sobre el terreno efectivos de seguridad y emergencias para efectuar labores de vigilancia o enfriamiento.