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Toyota sigue escribiendo la leyenda del Land Cruiser

El Land Cruiser 250 muestra un aspecto robusto y con carácter.

P. U.

El Toyota Land Cruiser es uno de los pocos 4x4 auténticos que sobreviven y uno de los todoterrenos señeros de la historia del automóvil. Ha dado, además, grandes alegrías a la marca japonesa en términos económicos, como demuestra el hecho de que, solo en España, se hayan vendido 72.500 unidades (de un vehículo que no es precisamente barato) desde comienzos de siglo.

En la hora de volver a actualizar un modelo que se remonta a 1951, Toyota se ha dado el gusto de celebrar sus orígenes al proponer un look retro, lleno de carácter y compatible al mismo tiempo con todas las comodidades y la tecnología que se demandan en la actualidad.

Una buena síntesis del nuevo enfoque del Land Cruiser, que tiene sus repercusiones en otros ámbitos que luego detallaremos, sería subrayar que conserva su estructura clásica de chasis de largueros y travesaños, junto con el arsenal 4x4 también tradicional (reductora, bloqueos de diferencial, etc.), pero incorpora modernidades como los asientos con calefacción y ventilación, el cuadro de instrumentos digital, la llave inteligente o el head-up display, a lo que hay que añadir tapicería de cuero, techo panorámico practicable, retrovisor interior digital y equipo de sonido JBL provisto de 12 altavoces.

El Land Cruiser 250, heredero de la tradición iniciada por la Serie 70, crece de manera considerable en todas sus cotas. Gana 8 centímetros de longitud, hasta 4,9 metros, y 7,5 cm de altura para alcanzar los 1,92 m, pero el mayor incremento se lo anota la anchura: +9,5 cm que llevan el total a 1,98 m.

El chasis añade 84 puntos de soldadura y 12 metros de adhesivo estructural que aumentan un 30% la rigidez de torsión con respecto al modelo anterior. Se han mejorado la fluidez de funcionamiento y el nivel de ruido tanto del sistema de control de descenso (DAC), utilizable ahora entre 4 y 30 km/h, como del Crawl Control, el dispositivo que permite al coche avanzar a mínima velocidad en terrenos especialmente complicados.

El nuevo Land Cruiser estrena además un quinto modo de conducción (automático, que se adapta al tipo de terreno por el que se circule) y una cámara que muestra los bajos del vehículo para que el conductor sepa en todo momento si debe extremar la precaución por la presencia de piedras grandes u otros obstáculos en el camino.

En cuanto a la transmisión automática, de ocho velocidades, dispone de desarrollos más cortos y de una primera particularmente que, con un ratio un 12% menor, casi hace superflua la reductora salvo que el usuario se adentre por zonas de dificultad extrema.

Para mover el modelo Toyota ha elegido un viejo conocido, el motor diésel de cuatro cilindros y 204 CV, susceptible de usar combustible renovable como el que ya comercializa Repsol y del que te hablamos en este artículo reciente.

Las emisiones de este propulsor, 276 gramos de CO2 por kilómetro, han obligado a la firma japonesa a replantear la estrategia comercial del Land Cruiser en Europa. Para cumplir los límites marcados por la normativa comunitaria, solo podrá vender 11.000 unidades anuales, de lo que se desprende que las entregas del modelo en España dejarán de ser las que ha disfrutado en los últimos años.

Los 250 vehículos de la First Edition, lanzada online recientemente al precio de 85.950 euros, se agotaron en apenas siete horas y llegarán a manos de sus propietarios hacia el mes de octubre. A esta serie especial de lanzamiento, reconocible por las ópticas delanteras redondas en lugar de rectangulares, le sigue ahora la versión VX, de la que se abren pedidos en pocos días y cuyas primeras entregas llegarán en octubre aproximadamente.

El VX sale a la venta por 76.450 euros y está limitado a 500 unidades. Incorpora tapicería de cuero sintético, faros delanteros multiled, techo solar practicable, bloqueo de diferencial trasero, alfombrillas de goma, DAC, Crawl Control y sistema multimedia Toyota Smart Connect con pantalla de 12,3 pulgadas.

Esperando a la hibridación

El panorama cambia con vistas a 2025, cuando el Land Cruiser recibirá por primera vez la tecnología de hibridación ligera de 48 voltios -aplicada al mismo motor turbodiésel- y podrá lucir por tanto el distintivo ambiental Eco en nuestro mercado. Una vez disponible esta solución, la gama se ampliará a tres acabados: GX, habitualmente dirigido a profesionales, VX y un más lujoso VXL, de los que se podrán servir en España un total de 1.250 unidades en ese año 2025 y sucesivos.

Los pedidos para estos primeros Land Cruiser mild hybrid se abrirán en el mes de julio de 2024, a un precio que está todavía por determinar.

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