El periódico del régimen, Canarias7, que ya nos ha dado por condenados varias veces, está haciendo su trabajo a la perfección. Es el responsable de divulgar al mundo cada uno de los asuntos judiciales en los que anda metido nuestro periódico en relación a Soria y a Mauricio, fundamentalmente, y pronto lo hará con los ocho jugadores del Universidad que nos han demandado por su honor tras el tongo ante el Cádiz de hace más de año y medio. En su afán por enturbiar nuestra credibilidad, mezclaron en su artículo del martes la presunta (ya lo confirmaremos cuando tengamos el auto) exigencia de una fianza para cubrir posibles responsabilidades civiles, con el decreto de libertad provisional para el encausado, cosa que se decreta siempre cuando los presuntos delitos (injurias y/o calumnias) no requieren tal medida cautelar. Para tranquilidad de nuestros lectores y luto oficial en otros ambientes, Carlos Sosa está en libertad y no ha tenido que depositar fianza alguna para ello (ni lo tendrá que hacer).