Otra joya de la política teldense, Francisco Valido, alcalde durante el periodo de referencia, ha vuelto a salir a la palestra para desmentir que haya acusado a Guillermo Reyes de los desmanes cometidos en la tramitación de la unidad de actuación Calero Alto II, la que ha motivado la nueva redada contra la corrupción de esta misma semana. Valido, que está imputado en la Operación Calero, ha difundido un comunicado en el que asegura que ante la Policía se limitó a decir que Reyes era el concejal de Urbanismo, como si los agentes que le interrogaban ignoraran tal extremo. El ex alcalde del PP pretendía curarse así en salud al afirmar que los expedientes urbanísticos llegaban a la Junta de Gobierno convenientemente informados por la Concejalía de Urbanismo, otra revelación de incalculable valor policial. Lo malo es que hay delitos que se consuman por negligencia in vigilando, que viene a ser más o menos lo que ocurrió en Telde con este y otros tantos casos de corrupción detectados. Y por detectar.