Jamás Canarias en general ni Coalición Canaria en particular, habían recibido tantos gestos de buena voluntad por parte de un Gobierno de España en tan poco tiempo. Y mucho menos si el tal Gobierno no está siquiera constituido. Acaba de pasar ahora mismo con las negociaciones entre CC y el PSOE, partido este último que ha confirmado sus anuncios de conciliación y de buen rollito, con lo que ha conseguido arrinconar al PP más de lo que el propio PP se había empeñado. Desde luego parece más que evidente que grupo parlamentario en el Congreso y en el Senado, presidencia de comisiones en ambas cámaras y, de remate para Canarias, un ministro isleño, suena hasta a empache. Ocho años del Partido Popular sólo arrojaron el balance de un director y era del Instituto Nacional de Meteorología (dicho sea con todos los respetos para Enrique Martín y los meteorólogos). Ya sabemos, ya, que hay que preguntarse a cambio de qué. Veamos.