Ha pasado algo desapercibida la marcha del PP canario del que fuera uno de sus más influyentes mandatarios, Benito Codina, que llegó a ser viceconsejero del Gobierno bajo las órdenes de la consejera Águeda Montelongo. Codina era una de las voces más autorizadas dentro de la formación conservadora, especialmente en materia de análisis sociológico, estrategia electoral y tácticas de información y campaña. Llegó a ser en un momento dado el principal colaborador de Larry Álvarez en esos asuntos, sobre todo cuando había que encargar encuestas, bien las que pagaba el partido o bien las que pagaban otros para que el partido las analizara. Codina aprovechaba convenientemente su amplio bagaje formativo y sus medios en la Universidad de La Laguna, de la que es profesor. Pero un día cayó en desgracia.