No hacía falta que Rajoy dijera aquello de que le gustaría tener más Sorias en el PP para que el líder de los populares canarios se inflara como un pavo real. De un tiempo a esta parte, José Manuel Soria parece nuevamente encantado de conocerse y ya ha vuelto a echarse a la calle y a dejarse ver en los sitios que estuvo evitando durante más de medio año. Los comerciantes del paseo de Las Canteras están sorprendidos de que el vicepresidente del Gobierno de Canarias haya sido visto por ahí hasta tres veces en el último mes, paseando en compañía de su esposa. Mientras, crecen los rumores de que el líder del PP canario simultaneará su candidatura a la presidencia del Gobierno canario, para la que ya ha sido oficiosamente designado por Rajoy, con la de la alcaldía de Las Palmas de Gran Canaria. De ahí tanta suela, dicen los analistas políticos más sesudos.