Carlos Taboada, el hombre que debe marcar las directrices de la producción regional de TVE en las Islas, pasará a la historia de la televisión como el cargo ejecutivo perfecto para no hacer nada y cobrar una pasta gansa, el comisario político inútil porque la otra parte del pacto no le dejaba estropear el mando a distancia. Son famosos en Televisión Canaria, a donde llegó de la mano de José Manuel Soria cuando se arrejuntaba con Paulino Rivero, sus cometidos sin sentido alguno, sus informes para el PP de cómo controlar la tele, funciones ejecutivas de esos tantos altos cargos que pululan por la cosa pública haciendo tanto daño a la imagen de la Administración y su funcionamiento, como los más de setenta que con despachos y gastos suntuarios incluidos ha tenido una cadena que el nuevo director de TVE-C conoce muy bien: TeleMadrid. Taboada, acostumbrado a trabajar solo por las mañanas sin dar pie con bola ni despeinarse, ha sido exclusivamente conocido en su paso por La Canaria por cobrar 100.000 euros para no dar ni golpe y acudir a su puesto de trabajo en coche oficial. Sí, en coche de la casa, pagado con el dinero de todos los canarios. Son esas ínfulas de alto ejecutivo improductivo y parasitario que tanto ensucian la gestión pública las que echan a perder cualquier confianza en los que nos gobiernan. Porque vaya nombramiento...