Algunos llaman a esta actividad “hacer política”, lo cual seguramente se podría traducir en otros territorios como antropofagia, o dicho en fino, luchas fratricidas. En el Partido Socialista Canario, sector Las Palmas de Gran Canaria, ha habido este verano una auténtica revolución que ha dado como resultado final que Arcadio Díaz Tejera fuera apartado de la carrera electoral hacia la alcaldía en favor de Jerónimo Saavedra. Hubo amagos de todos los tipos, defensas numantinas, enroques cortos y largos..., pero todo se colocó en su sitio cuando el que amenazó con exigir Primarias fue el mismísimo Saavedra. Y las pidió, por cierto. Pero hubo un momento concreto, situado más o menos en aquellos días en que los seguidores de Díaz Tejera se revolvían como gatos panza arriba, en que estuvo a punto de producirse un acontecimiento todavía más singular que el que colocó al magistrado excedente en situación de disponible forzoso.