El espíritu de diálogo reinó en las horas anteriores a la votación en la CCE, hasta el punto de que el irreductible José Sánchez Rodríguez, hasta hace poco el más conspicuo enemigo de Grisaleña, llamaba para dar tranquilidad y ánimos a los seguidores del nuevo presidente de la patronal. Había entendido que Grisaleña podía ser un presidente de consenso que cediera en algunas cosas para poderle hacer cesiones a él también. Ese ambiente de consenso llevó incluso a Fernando Fraile a retirar su candidatura a una de las vicepresidencias para evitar enfrentamiento y allanar el paso a personas como Roberto Góiriz o Espino Flores. El presidente de la patronal turística estará seguramente en el comité ejecutivo, donde se toman decisiones importantísimas del movimiento empresarial.