Mientras Demetrio Suárez confirma su posicionamiento, regresa a la palestra Carolina Darias, otros independientes se sitúan en buenos puestos y el PSC parece coger resuello, nos acordamos con sincero cariño de Eduardo González, defenestrado secretario general insular de Gran Canaria, caído en desgracia por sus propios méritos políticos y por los de otros que ahora se resitúan o, en el peor de los casos, quedan en expectativa de destino. Corrieron rumores maléficos que hablaban de que la dimisión de González fue tan sincera y espontánea que respondió a un pacto con la dirección regional del PSC para colocarlo -por fin- en la lista al Parlamento. Pues no: estamos en condiciones de confirmarles a ustedes (y al propio interesado) que de eso nada, que lo más seguro es que Pepe Alcaraz vaya de uno; una mujer de dos; otra persona de tres; y otra más de cuatro. Y ninguna de ellas es Eduardo González y sí Nina Santana, presidenta de la Gestora de Las Palmas de Gran Canaria. Más detalles en próximos capítulos.