Ferrer avanza con firmeza
El tenista español David Ferrer se clasificó este miércoles para la tercera ronda del Abierto de Australia, primer 'grande' de la temporada y que se disputa en Melbourne hasta el 27 de enero, después de derrotar con más trabajo del previsto al estadounidense Tim Smyczek en cuatro sets por 6-0, 7-5, 4-6, y 6-3, según informa Europa Press.
El de Jávea, el mejor cabeza de serie nacional en la cita, el cuarto, se tuvo que emplear a fondo para deshacerse de su desconocido rival, al que dominó de inicio en todos los sets, pero que, salvo en el primero y en el último, siempre tuvo la forma de reaccionar.
Y es que 'Ferru', tras un cómodo inicio ante Olivier Rochus, se topó con sus primeras dificultades serias ante el jugador americano, muy rodado al venir de la previa y que se había deshecho en la primera ronda del peligroso Ivo Karlovic, después de acceder al cuadro principal como 'lucky loser'.
Smyczek no se arrugó pese a mal comienzo de partido y forzó cuatro sets con el alicantino, que ahora se medirá en la tercera ronda con el peligroso chipriota Marcos Baghdatis, finalista en Melbourne en el año 2006.
Ferrer firmó un comienzo demoledor, pero a partir de ahí le llegaron los problemas, ante un rival muy agresivo, que hizo 39 ganadores, pero que acumuló hasta casi 80 (77), claves para que la balanza se decantase a favor del español, también algo errático y que gozó de hasta 21 bolas de rotura, aunque también cedió demasiadas (10).
Tras 25 minutos de partido, el cuarto favorito tenía bien encarrilado el choque tras endosarle un 'rosco' a Smyczek, que perdió los nueves primeros juegos del partido. Sin embargo, el americano no se vino abajo y reaccionó, equilibrando el partido, aunque, cuando se atisbaba una posible 'muerte súbita', el español logró un nuevo 'break' en el duodécimo juego que le puso claramente por delante.
Todo parecía decidido cuando el quinto jugador del mundo mandaba 3-1 en el tercero, pero una vez más el estadounidense se rehizo, en esta ocasión incluso para alargar el encuentro hasta el cuarto parcial donde el de Jávea volvió a tomar pronto la delantera para no dejarla escapar y cerrar su billete a la tercera ronda.
Victorias de Almagro y Verdasco
Los tenistas españoles Nicolás Almagro y Fernando Verdasco se unieron a David Ferrer en la tercera ronda del Abierto de Australia, primer 'Grand Slam' de la temporada y que se disputa en Melbourne hasta el 27 de enero, después de arrollar a Daniel Gimeno-Traver (6-4, 6-1, 6-2) y al belga Xavier Malisse (6-1, 6-3, 6-2), y ahora se medirán al polaco Jerzy Janowicz, finalista en el Masters 1000 de París, y al sudafricano Kevin Anderson, respectivamente.
Almagro despejó de golpe las dudas que había sembrado en el debut ante el estadounidense Steve Johnson, con el que necesitó cinco sets para ganar el partido. El murciano no se mostró nada cómodo sobre la pista de Melbourne Park, pero ante Gimeno-Traver hizo patente su nivel de ranking.
El valenciano se había deshecho en primera ronda del polaco Lukasz Kubot, también en cinco sets, y llegaba con ganas de dar una nueva sorpresa ante Almagro. Así comenzó todo, jugando con mucha intensidad y llevando el control del partido, ayudado por su servicio. Con dos saques en blanco y una rotura de servicio, se colocaba con un 1-3 en el primer set.
El quinto juego supuso un punto de inflexión en el partido. Tras ocho errores no forzados del murciano en los cuatro primeros juegos, el flujo de regalos descendió y el número once del mundo empezó a dominar el partido. Los fallos cambiaron de lado de la pista y era Gimeno-Traver el que parecía haber perdido el rumbo, algo que le costaba un parcial en contra de 5-1 con el que Almagro le daba la vuelta al marcador (5-4). El valenciano sacaba para igualar el partido, pero los nervios le traicionaron y, tras tres dobles faltas, cedía el primer set (6-4).
Almagro ya había acabado de tomar por completo el mando al partido y Gimeno-Traver no se sentía nada cómodo sobre la pista. Lo que al inicio parecía blanco ahora se había vuelto completamente negro. Su saque no entraba y sus errores no forzados eran continuos, lo que permitía a Almagro ir sumando 'break' tras 'break', hasta cerrar el segundo set con un aplastante 6-1.
Gimeno-Traver había pedido un descanso al final de la segunda manga. El valenciano no sabía cómo parar el vendaval de juego de su compatriota y optó por marcharse a los vestuarios, algo que no agradó en absoluto al murciano. Sin embargo, la estrategia no le sirvió, ya que la tónica del tercer set continuó igual y, con dos nuevas rupturas, Almagro dominaba por 4-0. El parcial de 11-1 en los últimos juegos dejaba claro el ritmo que estaba llevado el partido, hasta que el murciano lo acabó cerrando con un 6-2.
La otra buena noticia de la jornada la dio Fernando Verdasco, vigesimosegundo cabeza de serie en Melbourne y que firmó un gran partido ante un jugador peligroso como el belga Xavier Malisse, al que derrotó en por 6-1, 6-3 y 6-2 en menos de dos horas.
De este modo, el madrileño amargó a otro jugador de Bélgica, aunque en esta ocasión no sufrió tanto como en su estreno en el 'grande' ante David Goffin, frente al que tuvo que disputar cinco mangas. Ante un tenista más experto y hábil en este tipo de pistas, el zurdo únicamente cedió seis juegos y ningún set.
El semifinalista en 2009 se mostró demoledor y aprovechó la debilidad con el servicio de su rival, sobre todo cuando sacaba con segundos, para vivir un partido plácido en el que disfrutó de hasta 15 bolas de 'break'. Además, Malisse cometió hasta 45 errores no forzados, demasiados para dar emoción a un partido, donde únicamente fue por delante al inicio del segundo parcial.