Ramírez confía en que Josico logre el ascenso a Primera
El presidente de la Unión Deportiva Las Palmas, Miguel Ángel Ramírez, ha manifestado este jueves que el equipo isleño estaba “en una situación plana” con el entrenador Sergio Lobera, destituido el pasado 26 de mayo, y que el trabajo de su sucesor, José Moreno 'Josico', “dará sus frutos”. Ramírez ha hecho estas declaraciones tras la visita de la plantilla grancanaria a la Virgen del Pino en la capital grancanaria, este mediodía.
En su opinión, necesitaban “un cambio para estimular al equipo” y considera que han hecho “lo correcto”, aunque ha descartado criticar la labor de Lobera “porque hizo su labor durante estos dos últimos años, pero estas cosas le suceden a los mejores entrenadores del mundo”.
El presidente de Las Palmas está “convencido” de que el trabajo de Josico se verá reflejado en los resultados, “aunque los últimos no han sido los más apetecidos”, pero cree que después del próximo sábado “empieza otra historia diferente”, tras el último partido liguero ante la SD Ponferradina.
Ramírez no duda de que la Unión Deportiva disputará la promoción de ascenso y cree que lo hará “por méritos propios”. Pese a las tres últimas derrotas, la destitución de Lobera y los asuntos extradeportivos que han salpicado a la plantilla, como la salida nocturna de varios jugadores en Palma de Mallorca el pasado sábado tras perder por 2-0, cree que la afición apoyará al equipo el próximo sábado.
Además, ha considerado que el Estadio de Gran Canaria será “una olla a presión una vez se consiga la clasificación para disputar la promoción de ascenso”, que da por hecha. El consejo de administración, la plantilla, cuerpo técnico y dirección deportiva de la UD Las Palmas han visitado este mediodía a la Virgen del Pino, que se encuentra en la Catedral desde el pasado 31 de mayo.
El presidente, Miguel Ángel Ramírez, y el capitán, David García, han depositado flores a los pies de la Virgen. Nunca antes se había realizado una visita a la Patrona en la Catedral, ya que siempre se había hecho en la villa de Teror al inicio de cada temporada.
Las más de 300 personas que acudieron a la iglesia para presenciar el acto despidieron al equipo isleño con un fuerte aplauso, con la promesa por parte de los futbolistas de regresar a ver a la Virgen una vez se logre el ascenso a Primera.
