En vilo por la defensa
Las Palmas atraviesa un momento delicado de la competición, inmersa en la alta montaña del calendario donde debe batirse cuerpo a cuerpo con los candidatos al ascenso, el cuadro amarillo debe recuperar su seguridad defensiva, que le llegó a situar quinta clasificada. Ante el Alcorcón, con las bajas de Murillo y David García, la zaga concedió muchas facilidades a su rival, demostrando claros sintomas de flaqueza ante las dos importantes ausencias en la zaga.
Sergio Lobera, que basó la reacción del equipo en una sólida defensa que recibía pocas dianas, ha encajado en los tres últimos partidos ligueros un total de seis goles, con una media de dos por encuentro, regresando a las cifras negativas del comienzo de la temporada. El técnico aragonés encontró con David García, Murillo, Deivid y Dani Castellano una auténtica muralla, que en dos meses de competición encajó tan sólo dos goles (ante Sporting y Xerez).
Para la cita ante el Girona el técnico amarillo espera recuperar a sus dos pilares defensivos, aunque el jugador colombiano no pudo ejercitarse en el última sesion de los amarillos celebrada en Barranco Seco y su presencia dependerá de su evolución en los próximos días. Por su parte, David García se recupera de sus molestias y también espera recuperarse para la cita del próximo domingo en el Estadio de Gran Canaria.
Mayor goleada de la temporada
El cuadro catalán endosó durante la primera vuelta la derrota más dolorosa de la temporada al equipo grancanario, 5-0, donde Lobera sólo tenía a la mitad de su actual defensa. En esa cita Deivid y Dani Castellano se quedaron sin participar, mientras que Aythami y Corrales fueron los que ocuparon las laterales, con un nefasto resultado para los intereses isleños.
La defensa lleva trayendo cola en la entidad grancanaria desde el principio de temporada, siendo la línea más débil de la plantilla, ya que fuera de los cuatro titulares, el rendimiento del resto de defensores no ha cumplido con las espectativas del técnico. Tanto es así, que Aythami, Corrales, Pignol, Atouba y Juanpe sumen entre los cinco un total de 28 partipaciones en la presente liga (sólo cinco más de los que acumula el propio Murillo), demostrando la poca confianza que Sergio Lobera ha depositado en ellos. Sin embargo, en Santo Domingo había sentados en el banquillo hasta tres delanteros centros (Pando, Tato y Chrisantus), ya que la dirección deportiva estimó reforzar la vanguardia antes que el resto de líneas.