Unos ignoran que en política no son indispensables las formalidades jurídicas, mientras los otros, los pactantes, han de aguardar a sacar de las urnas diputados que poder sumar para formar Gobierno. Las encuestas conocidas dan esa posibilidad a CC-PP, que podrían reforzar los psocialistas si no consiguen espantar el fantasma de la abstención que beneficiaría a los que están. La existencia de un pacto in pectore se desprende de la constatación del viejo dicho de que los animalitos se conocen. No sería acuerdo contra natura sino el reagrupamiento de la derecha de siempre. Se observa el pacto, además, en el compinchamiento de los últimos episodios relacionados con las comisiones parlamentarias del caso Amorós y de la trama eólica. Les urge pasar página cuanto antes y ya CC habla de la inexistencia de responsabilidades políticas con notorio adelanto de las conclusiones de los investigadores. El emparejamiento está cantado y tendrían los psocialistas que dar tremendo salto y conseguir el número de diputados necesarios para ofrecer un matrimonio distinto. El pacto CC-PP lo niega o silencian las partes. No quieren levantar la liebre, a pesar de que corretea a sus anchas por esos campos. Lo curioso es que haya quienes se creen la negativa porque, dicen, Adán expulsó al PP del Gobierno canario; como si aquel rompimiento fuera para toda la vida y se quisiera ignorar que no fue ruptura deseada.Se olvida que antes de romper, CC intentó la cuadratura del círculo. Su acercamiento al PSOE en el Congreso se proclamó, recuerden, compatible con el pacto CC-PP en Canarias. La situación se mantuvo durante meses, hasta que el macho Soria se puso extremadamente borde con Zapatero, en la estela malcriada de Rajoy, creando tantas y tan serias dificultades con Madrid que obligó a Adán a echar al PP del Gobierno; muy a su pesar pues pasó a depender de los apoyos puntuales psocialistas en el Parlamento.Hoy las circunstancias son otras y ante el avance del PSC, sustancial pero no determinante a día de hoy, están abocados a entenderse de nuevo; se necesitan. ATI-CC, para continuar haciendo eso que llaman gobernar, no sé si sarcásticamente; Soria para salvar los muebles. De conseguirlo, descubrirán que la aritmética no otorga credibilidad política con que superar la crisis de modelo autonómico a que nos han llevado. Algo que no les importa demasiado porque si les importara ya se habrían ido. Por vergüenza.