El auto de Varona

El auto de Varona, que tenemos que respetar por encima de todo, pero del que podemos disentir, después de un análisis profundo del mismo y de la situación política en Canarias, creo ahora que es un pepinazo para Soria de incalculable magnitud. Del caso salmón hemos pasado al caso Soria, que aunque de momento ha escapado del salmón, con muchos de los temas pendientes que tienen correligionarios suyos del PP, con una veintenas de diputados por toda la geogfrafía de Gran Canaria, desde Telde a Mogán, y ya no hago de nuevo la lista porque es cansar al lector.

Llegando a este punto quisiera decirle a mi buen amigo Fernando Fernández Martín, ex-presidente de Canarias y destacado dirigente del PP, que en absoluto ha sido mi intención amenazar a la jueza Margarita Varona, eso sabes querido Fernando está muy lejos de mi estilo, eso se lo dejo para Federico Jiménez Losantos, que se pasó todo el juicio del 11-M insultando a jueces y fiscales, y que todavía insulta a jueces y fiscales con un juicio en el que ya se ha dictado sentencia.

Cuando dije que voy a escribir más de la jueza Margarita Varona que de la Unión Deportiva, y lo mantengo, es que hace unos años estoy más dedicado a la opinión política, incluida la sección de tribunales como la denominamos en los periódicos, y es que querido Fernando aunque sigo siendo amarillo hasta la médula, la verdad es que ahora me dedico más al periodismo de opinión política. Y de investigación. Por eso me extraña que un demócrata como tú, sigo creyendo sinceramente que lo eres, me hables de amenazas. Me demostraste en Tenerife hace años que eres una excelente persona, por eso me ha dolido que veas en mi anterior artículo una amenaza. En absoluto. De lo que sí estoy convencido de que el auto de la señora jueza Varona se escribirá un rato en los próximos meses. Ya verás. Y no solamente en mi caso, sino estoy convencido que otros colegas se referiran al auto citado en más de una ocasión. En mi caso lo haré sin desacato, y con mucho cariño.