La ciudad futura

Aclarada las cosa, me voy a esa “ciudad administrativa” que Jerónimo Saavedra y José Miguel Pérez proponen donde hoy está Infecar. Esto supondría el traslado de la Feria a El Rincón, como también propusiera en su día el PP. Con la diferencia de que los peperos pretendían dedicar la parcela a viviendas mediante otra de sus extrañas operaciones ladrilleras.

Las dos propuestas parten de un hecho cierto: en El Rincón tendría Infecar cerca alojamientos y puedo dar fe directa de las dificultades que durante los certámenes creaba su aislamiento, lejos de los hoteles y con malos accesos que la circunvalación permite hoy mejorar. La diferencia radica en que la idea del PSC es ubicar allí servicios públicos ahora faltos de espacio y dispersos por la ciudad baja donde ya no caben.

La propuesta del PP, en fin, no mejoraba los servicios; la del PSC implica su descentralización, lo que integraría mejor la zona alta en la ciudad, de la que está un tanto desgajada, y la potenciaría el trajín administrativo diario. La idea será sometida a la consideración de los vecinos, en especial de los afectados directos, lo que es otra diferencia respecto a la idea anterior.

Es propuesta a tener en cuenta. Me gusta menos la posibilidad deslizada por Saavedra de otro edificio junto a las actuales Oficinas Municipales del antiguo Metropole. Creo que esa franja llana, que corre junto al mar desde La Laja al Puerto de La Luz, constituye un valioso patrimonio de la ciudad y sé que existe la idea de potenciarla para la expansión del ocio ciudadano; si se salva algo de dinero de los desastres del PP.

Casi sin querer, el “frontis” de la ciudad, desde La Laja a La Luz, ha ido adquiriendo atractivos de general uso ciudadano y no sé, eso es cuestión de urbanistas, si el edificio que no descarta Jerónimo Saavedra recortará los espacios libres y los jardines de ese tramo del Metropole.

En cualquier caso, comienzo a percibir que Las Palmas de Gran Canaria es ciudad manifiestamente mejorable. Opciones hay.