En los últimos años, ante la indiferencia de todos se han perdido los transbordos de contenedores de Safmarine –“pelillos a la mar” en palabras del presidente de la Autoridad Portuaria-, precedidas por el abandono del puerto de todas las líneas internacionales regulares de MSC, ZIM, MARUBA-AUSTAL, MAERSK, P&O NEDLLOYD, DAL y otras. También se ha producido el cierre de los varaderos de Inter-Burgo España que han dejado a toda la provincia sin instalaciones de reparaciones navales de importancia y sin que la Autoridad Portuaria ofrezca alternativa alguna a éste problema. Igual ha ocurrido con otros servicios portuarios relevantes y tráficos y empresas indirectas generadoras de trabajo y riqueza en un puerto, que hoy ya no ofrece servicios de aguada en fondeo, ni retirada de lodos o productos contaminantes, ni servicios de suministro de aceites, ni talleres de reparaciones navales, ni empresas competitivas de aprovisionamiento a buques, y que además tiene monopolizados la mayoría de los servicios portuarios restantes: suministro a buques, terminal de contenedores, remolcadores, etcétera. La, a todas luces, tardía y aún fallida apuesta del presidente de la Autoridad Portuaria para sacar adelante el macro puerto de Granadilla, abandonando y desmantelando actividades portuarias estratégicas en el puerto de Santa Cruz de Tenerife, eliminando o retardando al máximo cualquier posibilidad de crecimiento en el “Puerto Principal de Tenerife” hace ya tiempo que está pasando factura en el contexto portuario de Tenerife. Sin embargo, los hechos y las realidades son tozudos, no lo decimos nosotros, lo dicen todos los informes serios e independientes que por ser contrarios a las tesis mantenidas por la Autoridad Portuaria desde hace ya muchos años apenas ven la luz ni tienen difusión en los medios de comunicación insulares porque son escondidos en los cajones de los despachos. Con absoluta contundencia en estos términos se expresa la profesora titular del Departamento de Economía Aplicada de la Universidad de La Laguna en su informe de agosto de 2006 La competitividad del puerto de Santa Cruz de Tenerife en el avituallamiento de combustibles, del que la AP no ha hecho la más mínima reflexión con los sectores implicados de la comunidad portuaria sobre las importantes y beneficiosas recomendaciones que se plantean precisamente para evitar que hechos como el que ahora denunciamos sobre el desvío de buques para Las Palmas se repitan. Con igual de contundencia se expresan las economistas María Manuela Gonzalez Serrano y Lourdes Trujillo Castellano en su trabajo Infraestructura portuaria: eficiencia de los puertos insulares en el entorno nacional, que entre otras importantes conclusiones dice: “La autoridades portuarias menos eficientes –en el período 1990-2002- han sido Santa Cruz de Tenerife, que además ha visto reducir su eficiencia en casi un 12%, y Alicante que, por el contrario, ha experimentado una mejora de casi 24 puntos porcentuales. Tampoco estos importantes parámetros implican reflexión alguna ni cambio de rumbo en las tesis de la Autoridad Portuaria de Tenerife. Y lo que es aún más contundente, lo dice la realidad portuaria.Si nos acercamos al puerto, vemos como un día sí y otro también, los muelles apenas mantienen actividad, pero los titulares de información que todos los medios de comunicación local han recogido en estos días ha sido la nota de prensa remitida por la Autoridad Portuaria presentando un crecimiento de la mercancía general en el primer semestre del año de hasta el 8%, información difundida sin entrar en ningún tipo de análisis ni comentarios desde el sector. Si así fuera, se entendería la lógica del crecimiento portuario en mercancía general debido al empuje económico generalizado en la Isla. Pero sin embargo, si nos comparamos con el conjunto de los puertos españoles, el crecimiento vegetativo del puerto de Santa Cruz de Tenerife es prácticamente insignificante y no ha dejando de descender puestos en el ranking nacional. El puerto de Santa Cruz de Tenerife no está agotado ni saturado, está muy mal planificado y gestionado, se encuentra a la deriva, sin ideas ni empuje para liderar la necesaria evolución que le permita abrir nuevos mercados y lo que es peor aún está totalmente desmotivado por un sector que ha sido abandonado a su suerte por unos responsables políticos que se han preocupado más de buen estado de los negocios privados propios o de sus amigos que del interés general que permita situar al puerto en los niveles de competitividad y eficiencia que le corresponden.(*) Pedro Anatael Meneses R. es Portavoz de la Plataforma en Defensa del Puerto de Santa Cruz. Pedro Anatael Meneses R. *